Setenta docentes derribaron una de las puertas de la residencia, pero las fuerzas de seguridad respondieron con petardos y piedras, lo que enfureció a los maestros, que incendiaron un vehículo oficial. (EFE)
Decenas de maestros atacaron la residencia oficial del nuevo gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, al término de una marcha para pedir su renuncia y el retorno con vida de los 43 estudiantes.
Setenta docentes derribaron una de las puertas de la residencia, pero las fuerzas de seguridad respondieron con petardos y piedras, lo que enfureció a los maestros, que incendiaron un vehículo oficial.
Aunado al evento narrado, a lo largo y ancho del estado se dieron diferentes manifestaciones, bloqueos de carreteras y marchas para exigir la aparición de los estudiantes.
El momento cumbre del día fue la reunión que sostuvieron los padres de familia con el presidente Enrique Peña Nieto en Los Pinos por más de seis horas.
Tras la misma, Peña Nieto anunció una serie de acuerdos logrados, entre ellos el de "fortalecer los esfuerzos de localización con un plan renovado de búsqueda".
El mandatario dijo que se acordó también crear una comisión mixta de seguimiento e información "con el propósito de mantenerlos informados cotidianamente del curso de las investigaciones".
Los padres, por su parte, dijeron que no disminuirán sus movilizaciones, pero confían en que el gobierno cumpla su palabra.