Timerman leyó un comunicado en el que respondió a las imputaciones de Alberto Nisman, el fiscal que investiga el ataque sufrido en 1994 en la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que dejó 85 muertos. (EFE)
El canciller argentino Héctor Timerman rechazó hoy la denuncia del fiscal que lo acusó a él y a la presidenta Cristina Fernández de urdir una maniobra para garantizar la impunidad de iraníes involucrados en el atentado a la AMIA.
Un día después de que estallara el escándalo, Timerman leyó un comunicado en el que respondió a las imputaciones de Alberto Nisman, el fiscal que investiga el ataque sufrido en 1994 en la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que dejó 85 muertos.
“La denuncia contra la presidenta muestra el grado de confusión y parálisis en el que se encuentra la causa (...) el fiscal acusa vilmente a la política más activa en buscar el juicio y castigo a los perpetradores del brutal atentado terrorista”, afirmó.
De acuerdo con Niman, la presidenta, el canciller y los dirigentes sociales Luis D’Elía y Fernando Esteche fraguaron un plan para ofrecerles impunidad a los iraníes acusados a cambio de reanudar las relaciones comerciales bilaterales con un intercambio de petróleo por granos.
La culminación de esta maniobra, denunció el fiscal, fue el Memorando de Entendimiento que Argentina e Irán firmaron en 2013 y a través del cual la república islámica se comprometió a permitir que los imputados fueran interrogados en Teherán, cosa que finalmente jamás ocurrió.
Nisman aseguró que, en negociaciones ocultas, Argentina le ofreció a Irán eliminar la “alerta roja” de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), que pesa sobre los iraníes acusados, cosa que tampoco sucedió porque la orden de detención siempre estuvo vigente.
En ese sentido, el canciller se preguntó cómo puede mentir el fiscal, si sabe que la anulación de la “alerta roja” es responsabilidad del juez de la causa, además de que el gobierno jamás hizo una solicitud formal ni informal.
Timerman recordó que Fernández fue una activa promotora de la investigación de la causa AMIA desde que era legisladora, tarea que después convirtió en una política de Estado una vez que asumió como presidenta, ya que siempre emitió una enérgica posición en contra del terrorismo.
“Valga, entonces, pedirle a quienes dudan de nuestro compromiso contra el terrorismo que sean honestos en sus dichos y dejen de lado sus temporales intereses electorales”, exigió.
El canciller recordó que la presidenta “exigió una y otra vez que Irán coopere con la investigación ya sea extraditando a los sospechosos o permitiendo sean juzgados en un tercer país. Buscó distintas fórmulas legales pero jamás dejó de denunciar la actitud negacionista de Irán”.
Al cuestionar la labor del fiscal, advirtió que debe aclarar si la denuncia tiene alguna relación con la reciente decisión del gobierno de separar de los Servicios de Inteligencia al espía Jaime Stiuso, quien es señalado como el hombre que le daba órdenes a Nisman.
“Ahora nos enteramos que mientras Cristina Fernández hacía de la causa AMIA una cuestión de Estado, el fiscal Alberto Nisman la investigaba. Nisman debería aclarar si consultó u obedeció al agente de inteligencia Jaime Stiuso”, señaló.
Timerman advirtió que esta será la única posición oficial por parte del gobierno en torno al caso, ya que “no se va a prestar al show mediático” del fiscal “por respeto a las víctimas que para algunos sólo son un instrumento o ariete para usar en la política nacional e internacional”.
