Las acciones que los organismos operadores llevaron a cabo en el 2014, sobre todo la construcción de nuevos pozos, se reflejó en un mejor servicio de suministro de agua a la población, al mismo tiempo que disminuyeron las fallas en los equipos y por lo tanto los reportes de quejas, dejando atrás el pretexto de escasez del agua.
La construcción de nuevos pozos ha sido necesaria para incrementar la disponibilidad de agua en los sistemas en algunas colonias de las ciudades de la zona conurbada, resolviendo las necesidades urgentes de algunas áreas urbanas rezagadas, aunque quedan todavía pendientes otras zonas de la periferia.
Una vez atendidas las urgencias, es momento de continuar en el 2015 mejorando el funcionamiento de los sistemas llevando a cabo acciones que fortalezcan la infraestructura hidráulica de distribución del agua y se mejoren las prácticas de operación para asegurar un abasto de agua consistente y permanente, utilizando menos agua como resultado del incremento de las eficiencias y reducción de pérdidas por fugas.
También es importante destacar el avance logrado en la infraestructura para mejorar la calidad del agua mediante la instalación de filtros removedores de arsénico en algunos pozos. Durante este año y el siguiente, se instalarán los filtros adicionales requeridos para que toda el agua suministrada a la población cumpla con la norma de calidad potable. Al respecto, es responsabilidad de las autoridades competentes (CONAGUA, Sector Salud, ayuntamientos y organismos operadores) dar seguimiento estricto a la operación de los filtros para asegurar la calidad del agua abastecida a la población, incluso es importante que se publiquen periódicamente los resultados de las evaluaciones que se realicen.
En la medida en que los organismos operadores avancen y se logre contar con una adecuada infraestructura y un control en su operación, se incrementará la eficiencia y se mejorará el servicio a la población, lo que permitirá contar con recursos económicos adicionales para ampliar la infraestructura para atender el crecimiento de la población y de las actividades comerciales e industriales. Esto permitirá fortalecer el servicio de agua en los núcleos habitacionales y parques industriales existentes, así como crear nuevos desarrollos.
De acuerdo a los avances en el mejoramiento de los servicios públicos básicos (agua, drenaje, seguridad, energía eléctrica, recolección de basura, alumbrado y pavimento), se podrá aspirar a nuevos niveles de modernización en las ciudades de la Comarca Lagunera.
En cuanto al abasto de agua, es muy importante que las autoridades municipales y directivos de los organismos operadores actúen con una visión de largo plazo, estableciendo una planeación estratégica que defina las acciones e inversiones requeridas para impulsar el desarrollo urbano e industrial con un esfuerzo adicional, más allá de la atención necesaria e imprescindible de la operación día con día.
Al contar con agua disponible en la región, falta crear en las ciudades una infraestructura hidráulica más amplia para el abasto de agua, al mismo tiempo que se mejora la operación y mantenimiento de los pozos, tanques y redes de distribución de los sistemas municipales.
