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“El mercado financiero móvil en México está avanzando, pero englobando a todos los jugadores como gobierno, instituciones financieras, proveedores de telecomunicaciones y el usuario final estamos en la infancia, con una calificación de 3.5 de 10 puntos posibles, comparado con lo que observamos en países desarrollados en Europa y Estados Unidos”, afirmó René Salazar, director ejecutivo de Fiserv para la región de América Latina, el Caribe y Canadá.
Actualmente, la tecnología permite hacer cosas impensables en materia financiera, en países desarrollados los medios de pago móvil son ya una realidad y una solución que poco a poco va ganando terreno al uso de efectivo para pagar o cobrar algún servicio.
Algunas naciones en la región como Brasil, Perú y Uruguay, comentó René Salazar, ya han comenzado a construir todo un ecosistema con el objetivo de acercar las soluciones de pagos móviles a todos los extractos sociales.
“Brasil toma la delantera emitiendo una ley que pone las cosas importantes en su lugar para impulsar a los jugadores a participar en el esquema, Perú y Uruguay ya van en ese camino. Son claros ejemplos de lugares donde el modelo ha funcionado”, explicó el directivo.
EL MERCADO LOCAL
En México han aparecido iniciativas aisladas de instituciones financieras que tratan de impulsar el tema de pagos móviles, pero se requiere de la acción de un organismo que regule todo el flujo de trabajo porque al final del día se trata de manejo de dinero.
“La plática recurrente entre los jugadores es concientizar y educar a los usuarios finales y operadores sobre las bondades que representa utilizar plataformas digitales y lo seguras que ya son, porque la tecnología ya está probada”, afirma René Salazar.
A FUTURO
Estudios de mercado señalan que en México, el 90 por ciento de los usuarios móviles se encuentran en edades entre 12 y 18 años.
“Eventualmente ellos no se preguntarán sobre la seguridad de realizar una transacción móvil, sino que demandarán servicios de banca que les permitan olvidarse de acudir a la sucursal y las instituciones financieras deben pensar en qué opciones les ofrecerán a esas nuevas generaciones.
Este es un tema de fortalecer el ecosistema, de poner a los jugadores en la mesa para estimular el crecimiento”, aseguró Rodrigo Santiago de la Torre, líder regional de Fiserv.
