La mayor parte de ellos, continuó, no están escapando de una persecución, y agregó que en esta nueva ola de inmigrantes encontraron a miembros de pandillas que están buscando oportunidades. (EFE)
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, admitió hoy que su país enfrenta una nueva crisis migratoria y señaló que la mayoría de los inmigrantes son hondureños, salvadoreños y guatemaltecos.
"El presidente Donald Trump me envió hoy aquí porque los Estados Unidos enfrenta otra crisis migratoria", dijo Pence a los medios tras una reunión con los presidentes de Guatemala, Jimmy Morales; Honduras, Juan Orlando Hernández y El Salvador, Salvador Sánchez Cerén.
A los mandatarios del Triángulo Norte de Centroamérica les dijo que "lamentablemente" la mayoría de los migrantes en situación irregular provienen "de estos países", y añadió que este año los números son "enormes", dejando hasta la fecha más de 150,000 personas centroamericanas que han hecho este viaje "tan peligroso" de forma "ilegal".
La mayor parte de ellos, continuó, no están escapando de una persecución, y agregó que en esta nueva ola de inmigrantes encontraron a miembros de pandillas que están buscando oportunidades.
"Les dije a los presidentes que esto tiene que terminarse. Esto amenaza la seguridad de los Estados Unidos y también como nosotros respetamos sus soberanías, sus fronteras, nosotros insistimos que ustedes respeten la nuestra", proclamó el vicepresidente.
Pence admitió que la situación en la frontera sur de su país es "más urgente que en el pasado" y agregó que las medidas tomadas por Estados Unidos buscan lo mejor para su pueblo y para los pueblos vecinos.
Entre las sugerencias que se abordaron en este encuentro, del que se han conocido poco detalles, el vicepresidente estadounidense resaltó la necesidad de hacer campañas para informar de los peligros y de la dureza del viaje, a la vez que pidió renovar la lucha contra la corrupción, los grupos delictivos y las pandillas.
Pence, que aseguró que seguirán recibiendo con los brazos abiertos a todo aquel que entre de forma legal, recordó además la necesidad de crear prosperidad y desarrollo en la región para evitar la migración irregular.
Es así como reiteró a los tres presidentes el apoyo de Estados Unidos para lograrlo.
"Si trabajamos juntos vamos a tener un futuro más prometedor", afirmó.