Una frase que he escuchado últimamente a muchos políticos, es: "Tenemos que tratar los temas puntuales de nuestro gobierno…" Y yo me pregunto: ¿acaso estos temas son tan puntuales que siempre llegan a tiempo?
No, para nada. Lo que pasa es que les parece muy elegante usar "puntuales" como sinónimo de "importantes" pero no lo son. Lo puntual -además de ser lo que "llega a la hora convenida"- es algo que no se puede dudar, algo cierto; si acaso lo que se quiere decir es que los dichosos temas a tratar son ciertos, no una cosa inventada por nuestros inocentes políticos.
No es difícil deducir que la palabra "puntual" proviene del latín puntualis que es "lo relativo al punto" y de éste -del punto- hay muchísimas palabras derivadas. La palabra "punto", a su vez, proviene de punctum, que significa picadura o punzada. Cuando terminamos de escribir una frase ponemos un punto, una señal pequeña redondita que le indica al lector que ahí se acabó la idea que estaba leyendo. En los textos, el punto tiene muchas otras funciones, como el punto de la letra 'i', para marcar el cierre de una abreviatura y para indicar pausas como el caso de los dos puntos y el punto y coma. En matemáticas, el punto separa a la parte entera de la decimal en los números.
"Nos vemos a las doce en punto" le decimos al amigo para vernos en algún punto de la ciudad y tomarnos un café; en el primer caso, usamos el punto para marcar la exactitud de la hora -"en punto", ni un segundo más ni uno menos- mientras que en el segundo caso, el punto indica algún lugar de la ciudad y se entiende como un lugar exacto, no una zona extensa, pues. Luego resulta también que el café está "en su punto", que quiere decir que está hecho de inmejorable manera y con un perfecto sabor. Ya se me antojó uno.
Un equipo de futbol -el que usted quiera- se quedó fuera del campeonato porque le faltaron puntos para poder calificar… así usamos también al punto para darle valor a las cosas. ¿Qué puntuación le darías a la película que acabas de ver? Pues yo le doy unos tres puntos, nada más porque está "palomera", o sea que nada más la vi como excusa para tragarme un cubo de palomitas. La puntuación, por cierto, es también la acción de puntuar, que es ponerle los signos ortográficos al texto. ¿Y entonces no se dice "puntar"? me preguntará un lector curioso. Pues sí existe la palabra "puntar", pero tiene el diferente significado de "poner sobre las letras los puntos del canto del órgano".
Al ir cosiendo una prenda se van haciendo puntadas en la tela -o cuero o cualquier material que se use- pasando la aguja con un hilo a través de ella. Una puntada es también una "punzada", que es un dolor agudo que repetidamente viene y se va. "¡Qué buena puntada te aventaste!" le decimos a quien sale con una ocurrencia ingeniosa, ya sea dicha o hecha, que fue tan certera que dio justo en el punto.
Hay mucho que decir sobre el punto y sus derivaciones, pero estoy a punto de que se me agote el espacio, así que mejor me despido y pongo punto final.
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ME PREGUNTA Moisés Jiménez: Escuché la expresión "La caja está llena de triques". ¿Existe la palabra "triques"? Si existe, ¿qué significa?
LE RESPONDO: Los triques son trastos viejos, generalmente inservibles que se guardan sin un propósito determinado.
LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA: Después de muchos días oscuros, siempre viene un día sereno.