Un 27 de abril nació María Guadalupe García Zavala, una de las últimas santas mexicanas
El 27 de abril de 1878, en Zapopan, Jalisco, México, nació María Guadalupe García Zavala, quien posteriormente se convertiría en la Fundadora de la Congregación religiosa de las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres. Sus padres fueron el Sr. Fortino García y la Sra. Refugio Zavala de García.
Desde temprana edad, María Guadalupe mostró un gran amor por los pobres y las obras de caridad, influenciada por la presencia constante de su padre, quien era comerciante frente a la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan. A la edad de 23 años, sintió la llamada de consagrarse a la vida religiosa, abandonando un noviazgo para seguir este llamado.
Junto a su director espiritual, el Padre Cipriano Iñiguez, fundó la Congregación religiosa de las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres, dedicada especialmente al cuidado de los enfermos. María Guadalupe, conocida como Lupita, ejerció el oficio de enfermera con humildad y devoción, incluso arrodillándose en el piso para atender a los primeros enfermos en un hospital que carecía de recursos.
A lo largo de su vida, la Madre Lupita demostró una profunda entrega a la vida religiosa y al servicio a los demás, incluso en tiempos difíciles como la persecución religiosa en México. Arriesgando su vida, protegió a sacerdotes y al Arzobispo de Guadalajara, escondiéndolos en el hospital que dirigía.
Tras su muerte el 24 de junio de 1963, María Guadalupe García Zavala fue honrada como un ejemplo de santidad y dedicación al servicio de Dios en los hermanos, especialmente en los pobres y enfermos. Su legado perdura a través de las numerosas fundaciones de las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres en México, Perú, Islandia, Grecia e Italia.