UCRANIA| ENTRE LAS VÍCTIMAS SE ENCUENTRAN 45 NIÑOS.
Los tripulantes avisaron de un incendio a bordo de la aeronave e intentaron efectuar un aterrizaje de emergencia.
EFE
Moscú, RUSIA.- Un avión de pasajeros ruso Tu-154 con 169 personas a bordo, incluidos 45 niños, se estrelló ayer en el este de Ucrania cuando intentaba efectuar un aterrizaje de emergencia tras ser alcanzado por un rayo.
Tres horas después del accidente, los ministerios de Situaciones de Emergencia ruso y ucraniano confirmaron la muerte de todos los ocupantes del aparato, que pertenecía a la compañía aérea Púlkovo, de San Petersburgo.
?Todas las personas que se encontraban a bordo han muerto?, dijo a la agencia Interfax la portavoz ministerial rusa Irina Andriánova, quien precisó que en el avión había 159 pasajeros y diez tripulantes, dos personas menos de lo anunciado inicialmente.
La compañía Púlkovo había informado que en el avión había once tripulantes y 160 pasajeros, incluidos cuarenta y cinco niños que regresaban de sus vacaciones en el balneario ruso de Anapa, en el mar Negro, a San Petersburgo para comenzar el año escolar.
En la nave siniestrada viajaban 39 niños de hasta doce años de edad más seis bebés menores de dos años, declaró un representante de la compañía.
Fuentes oficiales dieron a entender que la mayoría de pasajeros era de origen ruso y ucraniano pero que también había de otros países, en concreto holandeses, aunque la lista de víctimas publicada posteriormente hace pensar que eran rusos o ucranianos nacionalizados en otras naciones.
El avión cayó en un lugar de difícil acceso a 45 kilómetros al norte de Donetsk, ciudad en el este de Ucrania, adonde acudieron enseguida socorristas que ya rescataron los primeros 30 cuerpos sin vida.
?A las 15:37 hora de Moscú la tripulación envió un mensaje de S.O.S. y dos minutos más tarde el avión desapareció de las pantallas de los radares?, explicó a la prensa Irina Andriánova.
Según el jefe del Servicio Federal de Aeronavegación ruso, Alexandr Neradko, el avión se estrelló después de haber entrado en una ?zona de fuertes turbulencias?.
Sin embargo, Andriánova dijo que hay datos que indican que la nave ?se vio atrapada por una tormenta? y más tarde añadió que la hipótesis preliminar de la investigación apuntaba a que ?la catástrofe se debió al impacto de un rayo?.
Fuentes de la compañía Púlkovo declararon que los tripulantes del avión avisaron de un incendio a bordo a diez mil metros e intentaron efectuar un aterrizaje de emergencia, aunque no consiguieron sacar el tren de aterrizaje.
Andriánova afirmó que, según datos preliminares de la parte ucraniana, en el avión no hubo ninguna explosión, pues algunos testigos del accidente señalaron que la nave ?caía intacta?, sin haberse desintegrado en el aire.
Por su parte, el director general de Púlkovo encargado de los vuelos, Anatoli Samóshin, consideró ?poco probable? que el accidente fuera fruto de un atentado terrorista.
Al final de la jornada, Andriánova dijo que los socorristas y bomberos estaban apagando las últimas llamas del avión incendiado, cuyos fragmentos se han dispersado en un radio relativamente pequeño, y que los trabajos de rescate continuarían toda la noche.
Las autoridades de los aeropuertos de San Petersburgo y Anapa han creado centros de crisis para ofrecen información de última hora y asistencia médica y psicológica a los familiares de las víctimas.
La compañía aérea puso a disposición de los familiares un avión para que vuelen hoy a Ucrania con el fin de ayudar en la identificación de las víctimas del accidente.
En Moscú, el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó al Gobierno investigar el accidente, mientras la gobernadora de San Petersburgo, Valentina Matvienko, prometió que su Administración prestará sin falta ayudas económicas a todas las familias afectadas.
El ministerio de Emergencias ruso envió a Donetsk un avión con equipos de rescate, además de varios helicópteros desde regiones vecinas de Ucrania, mientras la Fiscalía rusa abrió un expediente penal para investigar el accidente.
En Kiev, el ministerio de Defensa se apresuró a declarar que ayer no había efectuado maniobras, en alusión a la tragedia de octubre de 2001 cuando los militares ucranianos abatieron por error con un misil un Tu-154 ruso con 78 personas a bordo.
Los Túpolev-154, principal avión mediano de la flota aérea rusa en las líneas internas, se utilizan desde 1972 y son capaces de transportar hasta 180 personas a distancias de tres mil 500 kilómetros, y el aparato ayer siniestrado fue fabricado en 1992.