El shiatsu es una técnica de masaje japonés, que se basa en la presión sobre diversas partes del cuerpo y sobre los canales utilizados en acupuntura por medio de presiones con los dedos principalmente el pulgar y manos, e incluso codos o rodillas.
El cuerpo es nuestro vehículo y aunque no es posible cambiarlo, sí podemos darle mantenimiento.
De acuerdo con la medicina oriental, en él hay puntos de energía o meridianos que si son bloqueados, llegan a provocar enfermedades y afecciones físicas.
Una manera de aliviar los malestares que parecen no mejorar con la medicina alópata es el masaje japonés o shiatsu.
Se trata de una técnica terapéutica originada en el país del Sol Naciente y que sigue principios similares a los de la acupuntura.
“Si una vez al mes se paga por ir al salón de belleza y hacerse un corte de pelo, manicure y otros tratamientos, ¿por qué no darse un masaje que será en beneficio interno y externo del cuerpo?”, dice Yuriko Takiguchi, directora de la Sociedad Mexicana de Shiatsu y Medicina Tradicional Oriental.
El hecho de que en oriente la gente sea longeva no se debe sólo a la dieta que llevan y la meditación que practican sino a los masajes.
Yuriko imparte esta técnica japonesa en un diplomado abierto a todo el público.
Por lo regular, el masaje japonés comienza a aplicarse en la espalda porque es lo que equilibra al cuerpo y dónde se ubica una buena parte del sistema nervioso central, sin embargo, se trabaja de pies a cabeza.
Al ir ejerciendo presión, se alcanzan paquetes neurovasculares y se desbloquea la energía que queda acumulada en el cuerpo.
El shiatsu es un gran aliado para remediar contracturas provocadas por el estrés y la actividad diaria.
“Trabajamos sobre el sacro y las crestas iliacas, ahí se maneja la energía de todo lo que está en esta zona, como son los ovarios y órganos sexuales. A las mujeres se les llega a acumular mucha sangre, así que les sirve para desbloquear”, asegura la terapeuta.
“El shiatsu no es sólo un masaje relajante, añade Yuriko, pues tiene efectos positivos en el sistema nervioso central, el sistema circulatorio, linfático, músculo- esquelético, colitis crónica, estreñimiento agudo, inflamación abdominal y otros problemas intestinales. Además abre las articulaciones y así los huesos respiran mejor”.
Debido a la fuerza ejercida y a los puntos claves a sanar, esta terapia sólo puede ser dada por un especialista que conozca bien el cuerpo humano y también que tenga una preparación física adecuada.
Una sesión de shiatsu dura de una hora a una hora y media.
Los pacientes con cáncer deben asegurarse de acudir con un verdadero especialista certificado, ya que al no presionarse los puntos energéticos adecuados es posible que el cáncer se agrave. Sucede lo mismo con personas con sida, el virus se puede “disparar” a consecuencia de una mala aplicación. En ambos casos, el shiatsu debe hacerse sólo con la aprobación y anuencia de un médico.
La edad no es un impedimento para someterse a una sesión de shiatsu, se puede dar desde a bebés hasta adultos mayores.
“Es recomendable que el tratamiento se haga una vez a la semana, puntualizó Takiguchi, porque tiene un efecto de siete días, durante los cuales se sienten los beneficios. Después se va espaciando a cada 15 días y luego hasta con intervalos de un mes”.
Relaja y ejercita
Otra terapia similar a la japonesa es el masaje tailandés. Se diferencian porque el segundo trabaja sobre líneas del cuerpo, no sobre puntos; y para darlo no se emplean los pulgares sino toda la palma de la mano.
Intercalando con las presiones se van dando estiramientos de yoga de forma que mientras se recibe el masaje.
Tiene beneficios muy similares a los del shiatsu, pero actúa sobre todo en el sistema músculo-esquelético, es decir, que ayuda a la flexibilidad de los músculos y al bienestar de los huesos.
Es un tratamiento un poco más fuerte que el masaje japonés, y por ello no puede ser aplicado a personas con osteoporosis o con prótesis.
En el masaje tailandés hay tres niveles: principiantes, intermedio y avanzado. En el último ya se ven posturas de yoga complejas.
Técnica del shiatsu
1. El masaje abarca todo el cuerpo. Se trabajan puntos de las piernas, pies, cabeza, espalda, abdomen, brazos, cuello, hasta cada uno de los dedos.
2. Ayuda al sistema nervioso central, de ahí que parte importante de la técnica se aplique en la espalda.
3. Se aplica sobre el mismo sistema de meridianos usados en la acupuntura, pero aquí cada canal cubre una mayor área del cuerpo.
4. Se recomienda tomarlo un una vez por semana, conforme avanzan los beneficios se espacia hasta una vez por mes.
