deslave sobre la carretera federal Huautla-Jalapa de Díaz sepultó a cinco vehículos, los cuerpos de auxilio han rescatado personas con vida y fallecidas. (El Universal)
Eran profesores la mayoría de las víctimas.
Al menos siete personas muertas y dos más se encuentran desaparecidas tras el desgajamiento de cerros a causa de las fuertes lluvias ocurridas en los estados de Jalisco, Durango y Guanajuato, en donde varios pueblos y comunidades están incomunicadas y hay más de 30 mil damnificados.
En Chihuahua, Sinaloa y Michoacán también sigue lloviendo, por lo que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) ordenó el desfogue de varias presas, lo que ha propiciado el desbordamiento de ríos y arroyos, que afecta miles de hectáreas de cultivos y cortaron caminos rurales.
La región Centro-Sur de Chihuahua se mantiene en alerta máxima por tercer día consecutivo, a la espera de una fuerte inundación por el derrame de la presa La Boquilla, la más grande del estado.
La ciudad de Parral fue declarada zona de desastre por el Sistema Nacional de Protección Civil, ante los graves daños que sufrió por las intensas lluvias del fin de semana pasado. Aquí, siguen incomunicados por vía terrestre 3 mil pobladores, y unos 6 mil no tienen agua potable, luego de que fue necesario quitar los motores de los pozos extractores para evitar que el caudal del río Conchos los destruyera.
En el municipio de Julimes hay afectaciones en casi cien por ciento de los cultivos de las comunidades de La Providencia, El Carrizo, La Regina y La Hacienda.
Y en el Saucillo, unas 200 familias están incomunicadas. El alcalde del lugar, Alejandro Guerrero, informó que aunque ya está bajando la crecida, se espera el embate de las aguas, ya que el cauce del río Conchos sigue aumentando por el agua que llega de la presa.
También la presa Huites, de Sinaloa, continúa desfogando, y se prevé su cierre en las próximas hora, luego de que alcance su nivel de conservación, informó Jorge Miguel Ramírez Pérez, director de la Conagua en Cuenca Pacífico Norte.
En Michoacán, el desbordamiento del río Lerma ocasionó daños en viviendas y caminos de La Piedad, Sixto Verduzco, Numarán y Penjamillo. En La Piedad se perdieron 5 mil hectáreas de maíz y sorgo.
En Jalisco, tres personas fallecieron y dos más se encuentran desaparecidas tras derrumbarse dos cerros en los municipios de San Sebastián del Oeste y Mezquitic.
Autoridades policiacas del estado informaron que en la brecha que conduce al rancho Soyatán, municipio de San Sebastián del Oeste, se derrumbó parte del cerro, sepultando una camioneta pick-up, en la que viajaban cuatro personas.
En el lugar lograron sacar los cuerpos de Eligio Plazola Llamas y Florentina Llamas Rojas, faltando por localizar a dos mujeres, una de ellas menor de edad. También en Mezquitic se derrumbó parte de un cerro que dejó una persona muerta y seis domicilios afectados en el rancho El Mirador.
En Durango, autoridades estatales declararon alerta amarilla en el Valle del Guadiana por tres presas que vierten sus excedentes a los ríos La Saucera y El Tunal, que amenazan con desbordarse e inundar al menos 12 poblados del municipio de Durango.
En la región de la presa Santiago Bayacora fueron hasta 57 milímetros de agua, en la comunidad de Valle Florido se reportaron 52 milímetros que ocasionaron la crecida del río del mismo nombre, donde la mañana de ayer falleció un taxista que intentó cruzar en su vehículo, pero la fuerza de la corriente lo arrastró y murió ahogado, consumándose así la cuarta víctima a causa de las lluvias e inundaciones.
El primer deceso se registró en el municipio de Santiago Papasquiaro cuando una familia que se trasladaba en una camioneta intentó cruzar un río, pero la fuerza de la corriente arrastró el vehículo y el conductor falleció; en el municipio del Mezquital otro varón quiso cruzar otro caudal montado en su caballo y ambos desaparecieron, fueron localizados aguas abajo ya sin vida. Apenas el martes se había registrado el deceso de una señora en el municipio de Otáez, cuando un cerro se desgajó y el alud prácticamente la dejó sepultada.
