Simón Charaf, propietario del Bar Bar, el cual se encuentra cerrado desde hace 90 días luego de la agresión que sufrió el futbolista Salvador Cabañas, envió una carta al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, en que solicita su intervención para que Televisa le otorgue el derecho de réplica a la "Versión Oficial" que, junto con la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), presentó ante la opinión pública en el noticiero de Joaquín López Dóriga, así como en otros espacios de noticias de esa empresa televisiva.
En el mensaje asegura que esa versión oficial contrasta con la verdad sobre el atentado contra Salvador Cabañas.
En la carta, el dueño del Bar Bar manifiesta que se ha atrevido a "hacer públicos los abusos, arbitrariedades y constantes violaciones de las que hemos sido objeto a través del montaje mediático que orquestó Televisa", consciente del interés del presidente Felipe Calderón de que la ciudadanía participe activamente en la denuncia de cualquier hecho que atente contra la legalidad.
"No restamos importancia a la agresión física sufrida contra Salvador Cabañas. Sobre este acontecimiento hemos expresado nuestro sentir solidario y nuestra indignación, y nos da gusto saber que al día de hoy se encuentra al 95 por ciento de su recuperación física", agrega en el texto.
Recalca que desde un principio, tanto el propietario del Bar Bar, como los empleados de ese centro nocturno, mostraron su disposición para colaborar en las investigaciones de ese incidente.
En la carta, comenta: "En reiteradas ocasiones hemos solicitado a Televisa nos permita presentar la verdad de los hechos con evidencias en video y documentos. Nuestra solicitud ha sido negada, violando nuestros Derechos de Réplica y de Libre Expresión, así como el Derecho a la Información del que goza la opinión pública".
Asimismo, dice conocer que una concesión de televisión la otorga el Estado Mexicano con el propósito de informar de manera objetiva, cumpliendo con una función social para todos los mexicanos, y Televisa no lo ha hecho así, sino por el contrario, ha deformado la verdad para fines particulares.
Por esa razón, solicita la intervención de la Secretaría de Gobernación (Segob) para asegurar que Televisa cumpla con su función de ser un medio objetivo y balanceado, permitiéndole el derecho de réplica consagrado en la libertad de expresión.
Charaf asegura que el propósito, sólo es el de presentar su versión en los mismos espacios informativos empleados "para distorsionar la verdad, las evidencias de las mentiras y calumnias de que hemos sido objeto, contrastándolas con la verdad de los hechos, misma que presentaremos con las evidencias correspondientes".
Advierte que en caso de no aceptar Televisa lo anterior, quedará constancia ante el gobierno mexicano y ante la opinión pública, de la falta de ética y rigor periodístico con que presuntamente se manejó esa empresa en la información del caso, dejando claros los intereses económicos que hay detrás de esto.
En la carta se extiende un llamado al resto de los medios de comunicación que siguieron la versión de Televisa, a que le brinden la oportunidad de presentarles con evidencias la verdad de los hechos.