Daniel 'Hachita' Ludueña y Vicente Matías Vuoso fortalecen la banca de los Guerreros, que además contará con otros elementos que pueden salir a la cancha en caso de que se complique el partido. (Archivo)
para nadie es un secreto que la fortaleza del Toluca es su defensa y dependen del ataque con Mancilla y "Sinha", aunque con incorporaciones interesantes de Esquivel y el "Avión" Calderón.
El sistema del "Chepo" le ha dado excelentes resultados, con par de títulos en el futbol mexicano. Uno con las Chivas Rayadas del Guadalajara y el otro con estos mismos Diablos Rojos.
Su éxito ha llamado poderosamente la atención de las Águilas del América, aunque también de la Selección Mexicana, tras su participación en la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.
Talavera, siempre bajo la sombra de Oswaldo Sánchez en el Rebaño Sagrado, ha sido un excelente sustituto con los escarlatas bajo los tres postes, luego de la larga lesión del argentino Hernán Cristante. En el partido de ida de la final fue factor, al tener gran actuación y evitar la caída de su equipo.
Los Diablos Rojos juegan con un fijo 4-4-2, al estilo brasileño, con dos zagueros espigados como Dueñas y Novaretti, así como laterales rápidos en el caso de Cruzalta y Manuel de la Torre, aunque este último no podrá ver acción por suspensión.
Ese sector derecho pudieran explotarlo los albiverdes, aunque probablemente Cruzalta se cambie a esa banda y el paraguayo Osvaldo González patrulle el sector derecho.
La media cancha es envidiable, con un Romagnoli robando balones a placer, ayudado por el juvenil Antonio Ríos, para así comenzar a generar jugadas de peligro, sobre todo impacientando al rival, con mucha posesión del balón.
Los Guerreros dependen del juego colectivo y de individualidades, pero siempre con vocación ofensiva. En su portería sufren mucho, con los balones parados, pese a la estatura de Baloy y Lacerda.
El "Chato" Rodríguez marca el ritmo de partido y la pausa para saber cuándo y por dónde atacar, ayudado por un revolucionado Arce, a quien parece caerle bien las liguillas, como aquella inolvidable del Clausura 2008, con un tanto agónico en semifinales y su tanto en el partido de ida por el campeonato.
Darwin Quintero y Oribe Peralta preocupan mucho a sus adversarios, aunque los mexiquenses supieron contrarrestarlos al escalarse y jugarle con doble cobertura, evitando las letales paredes y triangulaciones.
Con un líder impresionante en cuanto a experiencia y colmillo, como el caso de Oswaldo Sánchez, los santistas tienen una solvencia bajo sus tres postes, pero el ataque santista es mucho mejor, con mejor entendimiento.
En la banca un "Toro" está listo para embestir y un "Hacha" para cortar, dos de los pilares de los Guerreros que han tenido que ceder sus lugares en la titularidad por diferentes circunstancias.
Habrá mucho nerviosismo en el campo lucifer, aunque ambos con la experiencia de un título reciente, con la necesidad de ganar, luego de la igualada en la Comarca, donde los ganadores serán los aficionados.
También servirá para definir cuál equipo entrará directo a la fase de grupos, dentro de la Liga de Campeones de la Concacaf, en su edición 2010-11, y cuál enfrentará en un repechaje al club San Juan Jabloteh de Trinidad & Tobago.
Toluca terminó con el "rosario en la mano" el partido de ida en suelo coahuilense, unos 90 minutos que trabajó, pero que tal vez sacó más de lo que propuso, ya que en todo momento tuvo encima la "metralla" santista.
Este equipo tiene empaque, lo enseñó al venir de atrás para empatar y posteriormente para darle la vuelta, sin embargo, sufrió de más para no regresar con desventaja, porque todo el segundo tiempo fueron incapaces de quitarse ese dominio al que fue sometido.
Pese a que salieron con el empate del nuevo Estadio Corona, llegan en circunstancias completamente diferentes a las que enfrentó en fases anteriores, ya que ahora no le basta el resultado en la ida, sino que está obligado a salir con la victoria en el marcador global para levantar el trofeo.
Habrá que ver de qué manera plantea su esquema el técnico José Manuel de la Torre.