El espectáculo de la lucha libre ha formado parte de la cultura lagunera desde hace varias décadas, sin embargo, desde hace años vive una devastadora crisis que amenaza con el cierre de más arenas. (Fotografías de Jesús Galindo)
Torreón, Coah.- Los tres últimos años han marcado un rumbo diferente para la lucha libre lagunera, un espectáculo tradicional para la región que vive una de sus peores crisis debido a la inseguridad y a la crisis económica, situaciones que repercuten en la taquilla.
Javier Dipp, responsable de la operación de la Arena Olímpico Laguna de Gómez Palacio, con más de 50 años en funcionamiento, dijo que la inseguridad en las calles de la Comarca Lagunera generan temor entre la ciudadanía, que prefiere quedarse en casa antes que exponerse a sufrir alguna agresión.
José Acero, empresario del Deportivo Lee Roy, situado en la colonia Aviación, coincide en señalar a la inseguridad como uno de los principales factores que ha afectado la taquilla de cada domingo, día en que se realizan en este lugar las funciones de lucha libre. En esta arena la taquilla ha caído en un 50 por ciento.
Para el presidente de la H. Comisión de Box y Lucha Libre de Torreón, Ramón Luján, los empresarios deben tomar en cuenta aspectos como la inseguridad para determinar el horario de las funciones.
Comentó que hay arenas que llegan a cerrar después de la media noche, lo que significa un gran riesgo para las familias que acuden a esos escenarios, más aún si las funciones son dominicales.
Pero además de la inseguridad está el factor de la crisis económica, el cual es motivo de que las arenas estén vacías. La gente prefiere gastar su dinero en otras prioridades y dejan la diversión para el final.
José Acero reconoce que actualmente las arenas sobreviven con mucho esfuerzo, porque en ocasiones no logran recaudar lo necesario para cubrir al menos los gastos que se generan por montar una función.
"Los compromisos por concepto de impuestos y permisos se han incrementado en la actual administración y hacen más gravoso y difícil seguir adelante, pero uno busca adaptarse y con la ayuda de los propios gladiadores se mantiene abierta la fuente de trabajo".
Comenta que en la actualidad se debe pagar por función 550 pesos por concepto de permisos a los departamentos de Espectáculos y Alcoholes, 50 pesos a Protección Civil y 200 pesos a la Comisión de Box y Lucha Libre por la autorización del cartel.
Además, se realiza un desembolso para cubrir gastos de publicidad, consistentes en perifoneo en las colonias aledañas, la pinta de rótulos y elaboración de volantes.
También figura en la lista de egresos el pago de un promedio de mil pesos por concepto de renta del local cada semana, además de sueldo a quienes laboran en las arenas y, desde luego, la nómina de los gladiadores, la cual asciende a 3,200 pesos como mínimo, en caso de que sean luchadores locales, pero de incluirse elementos foráneos o estrellas, el costo de la papeleta y autorización se incrementa en forma considerable.
La situación es similar en la Olímpico Laguna, incluso Javier Dipp reconoce que si esta arena no ha cerrado hasta el momento se debe al respaldo de los propios gladiadores, quienes conscientes de la situación se acomodan al recurso económico existente, manteniendo con ello abierta una fuente de trabajo, con la esperanza de que la situación se revierta en un futuro cercano.
Cuestionado sobre la ausencia de las estrellas nacionales del ring en escenarios locales, destacó el encarecimiento de las garantías de este tipo de elementos, las cuales llegan a costar entre 15 y 35 mil pesos, además de los gastos de transporte (avión o autobús), así como el pago de hospedaje, situación que encarece y hace prohibitiva su contratación en tiempos difíciles como los que hoy se viven en La Laguna.
MENOS SUELDO
José Acero comenta que la crisis ha obligado a pagarle menos a los luchadores. De acuerdo al empresario, en su arena trabaja un promedio de 22 elementos por función, los que dan lugar a cinco combates durante una jornada, los que de acuerdo a su categoría y turno en el cartel ganan 50, 80, 100, 150 y 200 pesos.
"Sabemos que la paga es baja, pero la situación nos ha obligado a trabajar así. Los muchachos entienden y saben que de otro modo estaríamos obligados a cerrar los espacios.
La entrada de público ha bajado en este escenario hasta un 50 por ciento y hoy en día entran entre 80 y 100 personas con boleto pagado, entre niños y adultos, "pero a la vez entran alrededor de 40 personas gratis, entre las que figura el invitado a que tiene derecho cada gladiador''.
Ante esta situación, Javier Dipp asegura que las arenas de la región "viven de milagro".
"Las empresas que promueven la lucha libre en La Laguna sobreviven de milagro, ya que en muchos de los casos, los ingresos en las taquillas no alcanzan ni para cubrir la nómina de los gladiadores y los gastos de operación de un escenario".
Sin embargo, ha habido empresarios que han cerrado sus arenas debido a la inseguridad y la crisis económica. Una de ellas fue la Arena La Rosita de la colonia Vicente Guerrero, la cual durante meses se había mantenido con altibajos. Igualmente se podían ver excelentes entradas en la presentación de elementos foráneos y una semana después un escenario casi vacío, lo que provocaba pérdidas a la empresa responsable.
También cerró sus puertas a la lucha libre la Plaza de Toros Torreón, luego de meses de campaña, encontrándose en este mismo riesgo otros escenarios regionales y con ello la pérdida de plazas de trabajo para este castigado gremio del deporte.
Para Javier Dipp a esta crisis no se le ve una posible solución a corto plazo, y que el esfuerzo por sobrevivir en el mercado seguirá a cargo de empresarios y luchadores, a la espera de que las autoridades hagan su parte en generar las condiciones de seguridad y desarrollo económico que permitan a la comunidad alcanzar un nivel de vida estable y seguro, que por consecuencia se refleje en el repunte de actividades como la lucha libre profesional, deporte que ha sido parte de la cultura mexicana a lo largo de más de un siglo.
50PESOS
Llega a ganar un gladiador por función.
50POR CIENTO
O más, ha caído la asistencia de público en algunas arenas locales de lucha libre.