Guadalupe Victoria. Primer presidente deMéxico.
En las páginas de la historia de México figuran los nombres de dos coahuilenses y un duranguense que fueron piezas clave en la Independencia del país y la formación de la República.
La odisea de Victoria, del monte a la Presidencia
Guadalupe Victoria no sólo luchó por la Independencia de su Nación, sino por la creación de un régimen republicano.
Nació en la Villa de Tamazula en septiembre de 1786, en la entonces provincia novohispana de Nueva Vizcaya, bajo el nombre de JoséMiguel Ramón Adaucto Fernández y Félix. A muy corta edad quedó huérfano de padre, por lo que su tío, el cura Agustín Fernández, se hizo cargo de su formación. Ya en la adolescencia abandona su hogar para radicar en Durango capital, en donde entra a estudiar al seminario. Más tarde viaja a la Ciudad de México para inscribirse en el Colegio de San Ildefonso, en donde estudió hasta el estallido de la rebelión insurgente de Miguel Hidalgo y Costilla.
En 1811 sale de la capital de la agonizante Nueva España para unirse a las tropas de José María Morelos, con quien, se dice, combatió en el sitio de Cuautla. Es en esas fechas cuando cambia su nombre por el de Guadalupe Victoria, para honrar a la “virgen morena”, primer símbolo de la insurgencia. Su destreza y valentía en batalla descollaron durante el asalto a Oaxaca, en noviembre de 1812, donde le fue ordenado el ataque a un fortín rodeado de fosos anegados. Fue en este lugar en donde, según los registros históricos, pronunció la frase “Va mi espada en prenda, voy por ella” para luego lanzarse al combate contra las fuerzas realistas, a las cuales derrotaría.
Son célebres también sus andanzas por Veracruz, provincia que estuvo bajo su control hasta 1817, cuando su ejército fue derrotado en Palmilla. A partir de entonces se refugió en el monte, en donde resistió los embates de las tropas del virrey, de quien rechazó una propuesta de amnistía.
Reaparece pocos meses antes de la consumación de la Independencia, pero inmediatamente se distancia de la figura de Agustín de Iturbide, quien posteriormente se declararía emperador de México. Victoria inicia entonces su lucha republicana.
El régimen imperial lo encarcela, pero logra escapar para unirse a la rebelión de Antonio López de Santa Anna. Una vez que Iturbide abdica, conforma el Triunvirato con Nicolás Bravo y Pedro Celestino Negrete.
Posteriormente fue nombrado diputado por Durango del Congreso Constituyente de 1824 para luego ser elegido como primer presidente de México, del 10 de octubre de ese mismo año hasta el 31 de marzo de 1829. Retirado a la vida privada en sus últimos años y víctima de constantes ataques epilépticos, Victoria muere el 21 de marzo de 1843 en Perote, Veracruz.
Melchor Múzquiz, valiente militar y político honrado
Melchor Múzquiz, militar insurgente y posterior político del México independiente, es recordado como uno de los servidores más honrados de los primeros años de la República.
Vio la luz el 6 de abril de 1788 en el presidio de Santa Rosa en la provincia de Coahuila, también conocida como Nueva Extremadura. Fue bautizado con el nombre de José Ventura Melchor Ciriaco de Eca yMúzquiz de Arrieta.
Bajo la protección del cura José Miguel Sánchez Navarro, fundador de la poderosa dinastía de terratenientes, Melchor entra a estudiar la carrera de jurisprudencia en el Colegio de San Ildefonso de la Ciudad de México. No obstante su trayectoria destacada como alumno, meses después de que el párroco de Dolores, Miguel Hidalgo, se levantara en armas, cambió los libros por las armas. Se unió a las tropas de Ignacio López Rayón y según algunos historiadores luego estuvo bajo el mando de Guadalupe Victoria.
Su capacidad como militar quedó demostrada en los combates librados contra las tropas realistas en Michoacán y Veracruz. En 1815, ya como coronel, le fue concedido el mando del regimiento Salvatierra, pero cayó prisionero y fue condenado a muerte.
Gracias a la intervención de su influyente protector (Sánchez Navarro), obtuvo el indulto, pero se tuvo que retirar de la lucha para vivir confinado en Monterrey hasta la consumación de la Independencia.
Reaparece en 1822. Simpatizante del “partido” republicano y con ideas liberales, se opuso desde el principio al régimen imperial de Iturbide.
Fue diputado del Congreso Constituyente y nombrado gobernador del Estado de México en 1824. El presidente Guadalupe Victoria lo hizo jefe del Regimiento de la República. También fue senador por Coahuila y comandante militar de Puebla, esto en 1829.
De agosto a diciembre de 1832 fungió como presidente interino de la naciente República Mexicana, en sustitución de Anastasio Bustamante. En el poco tiempo que estuvo al frente del Gobierno de la Nación, tuvo que sortear inmensas dificultades económicas.Mandó acuñar por primera vez monedas de cobre, estableció impuestos por puertas y ventanas y fijó límites en los precios de los artículos de primera necesidad.
Su honradez, humildad y conducta incorruptible se volvieron proverbiales. Después de haber alcanzado la cima en la vida pública nacional, murió en medio de la pobreza el 14 de diciembre de 1844. Su ciudad natal hoy lleva su nombre.
Miguel Ramos Arizpe, el modelador de la República
El federalismo en México no puede entenderse sin la figura de José Miguel Ramos Arizpe, quien nunca abandonó sus ideales, incluso estando en prisión. Nació el 15 de febrero de 1775 en San Nicolás de la Capellanía, en la provincia de Coahuila. Inició sus estudios en el Seminario de Monterrey. En 1803 fue ordenado sacerdote y posteriormente recibió el grado de bachiller en filosofía, cánones y leyes. Sus amplias cualidades para el estudio le permitieron titularse como licenciado en derecho canónico en 1807. Un año después obtuvo el doctorado en cánones por la Real Universidad de Guadalajara.
Como autodidacta estudió jurisprudencia y en agosto 1810 el Colegio de Abogados de México le concedió el título de doctor en Leyes. Un mes después, el Ayuntamiento de Saltillo lo nombró diputado por Coahuila ante las Cortes de Cádiz para la creación de la nueva constitución de la monarquía española.
En su intervención se reveló como un orador brillante de pensamiento liberal y profundo conocimiento de las leyes y de la situación de la provincia que él representaba. Promovió ideas revolucionarias como la creación del municipio libre, la formación de diputaciones provinciales, el fomento del comercio sin monopolios, la libertad de imprenta y la educación popular.
Cuando Fernando VII retomó el trono en España en 1814, disolvió las Cortes, por lo que quedó sin efecto la Constitución de Cádiz. La corona intentó sin éxito disuadir a Ramos Arizpe de sus postulados liberales con ofrecimientos. Se dice que la respuesta del legislador fue la siguiente: “Yo no he salido de mi tierra a mendigar favores del despotismo; la misión que se me confió es de honor y no de granjería”.
Miguel fue encarcelado acusado de traición al rey. Cuando el régimen absolutista fue derrocado en España, obtuvo su libertad, y una vez que la causa independentista triunfó en México, regresó para participar en la creación del proyecto republicano federalista, aprobado en 1824 por el Congreso Constituyente.
Posteriormente ocupó el cargo de ministro de Justicia y secretario de Hacienda y continuó promoviendo el federalismo hasta su muerte, acaecida el 28 de abril de 1843, debido a una gangrena. Al igual que a Melchor Múzquiz, la ciudad en donde nació lo honra con su nombre.