Presidente y entrenador coinciden en el escaso aporte de los extranjeros
TORREÓN, COAH.- Lesiones, “mala suerte”, toma de decisiones equivocadas en los últimos segundos de un partido, no haber cambiado a Emeka Okenwa cuando apareció su lesión del nervio ciático, mal desempeño de los jugadores extranjeros, baja de juego de Issac Gildea, fueron algunas causas por las que Algodoneros de la Comarca no calificó al playoff.
Antes de que iniciara la temporada 2003, Eduardo Ganem Pérez, presidente del club, se comprometió en rueda de prensa calificar a su equipo al playoff, para borrar la mala campaña del 2002.
El directivo se lo atribuyó, en primer término, a las lesiones de sus jugadores importantes: Emeka Okenwa se lastimó el nervio ciático, Chad Allen el tobillo izquierdo, se recuperó un poco pero bajó de juego; Douglas Beaty tuvo problemas con la rodilla izquierda.
En segundo término, a la “mala suerte”, pues la fortuna no los acompañó en los momentos clave, como aquella canasta que falló debajo del aro Marcos Chávez contra Santos de San Luis Potosí, cuando perdieron en el Auditorio Municipal por 101 a 103, el 27 de septiembre.
“Tomamos algunas malas decisiones en los segundos finales del partido, contra Halcones de la Universidad Veracruzana de Jalapa, en el que debimos haber cometido falta para darle los tiros finales y tener la pelota en posesión, pero por hacer una marca personal nos anotaron con tiros de tres y perdimos”.
Contra Zorros de Morelia –recordó–, el coach Marcelo Richotti pidió que se cometiera la falta, pero dejaron libre al único jugador que podía tirar y les anotó, fueron errores de concentración que costaron puntos.
Rendimiento de los extranjeros
Del trabajo realizado por los jugadores extranjeros, aceptó que no fue lo que esperaban de ellos, Douglas Beaty tuvo muchos altibajos, no estuvo concentrado al cien por ciento, a veces daba buenos partidos, de repente bajaba, fue muy irregular.
“Emeka Okenwa jugó lastimado desde el inicio de la temporada, debimos haberlo cambiado cuando empezó con su problema del nervio ciático, ese fue uno de los errores que cometimos, pero con la esperanza de que se recuperara lo dejamos casi hasta el final”.
Calificó al nigeriano como un jugador de calidad, fue uno de los motivos que los orilló a esperar, lo de la indisciplina contra Halcones de la Universidad Veracruzana de Jalapa pudiera interpretarse de muchas formas, pero en realidad se le dio de baja por la lesión.
“Chad Allen dio tres excelentes juegos, en los que anotó más de 30 puntos, inexplicablemente se cayó, por eso tomamos la decisión de traer a Carlos Booker para que lo supliera”.
A ello sumó las lesiones de Freddy Arcobedo en rodilla derecha, Arturo “El Loco” Velasco con hernia inguinal y Marco Aurelio Verdejo con problemas en hombro izquierdo, Marcos Chávez con desgarre abdominal.
“Issac Gildea no tuvo una temporada tan buena como con Leñadores de Durango, promedió 27 puntos por partido cuando pudieron haber sido arriba de 35, a mitad del torneo bajó sensiblemente su juego, se habló con él y repuntó al término del mismo, en los dos últimos anotó 41 y 43 puntos”, precisó.
La ausencia de Jones
Nick Jones Velázquez, jugador norteamericano de ascendencia mexicana, llegó a Algodoneros y se desempeñó bien durante las tres semanas que estuvo en el equipo, su regreso se debió por razones de estudio.
Admitió que la salida de Nick pesó mucho, pues se había adaptado bastante al equipo, cumplía con la función de movedor, aunque su posición natural era dos, aportaba tanto al ataque como a la defensa.
Fue suplido por Marcos Chávez, quien tardó en acostumbrarse al esquema del coach Marcelo Richotti, se perdieron algunos juegos en este cambio, que con Nick pudieron haberse ganado.
Richotti regresa
El directivo se mostró contento con el desempeño de Marcelo Richotti, es un coach que sabe dirigir, maneja bien al grupo, cometió algunos errores en la toma de decisiones, pero al platicar con él aceptó su falla.
“Todo ser humano se equivoca, es admirable que aceptara su error, en términos generales, quedo contento con su desempeño, creo que puede mejorar mucho, pues ahora conoce más el basquetbol mexicano”.
La intención de la directiva es que regrese la próxima temporada, en la que sin duda alguna aportará más al equipo.
No hubo indisciplina
Al tocar este aspecto calificó como bueno el manejo del equipo por parte de Marcelo Richotti, quien logró un grupo disciplinado, no obstante que a algunos jugadores les gusta la fiesta, pues antes que profesionales son jóvenes, pero no incurrieron en faltas graves.
“Los muchachos fueron responsables, siempre estuvieron en condiciones óptimas antes del partido”, aseguró.
De la indisciplina de Emeka Okenwa en el partido contra Halcones de la Universidad Veracruzana, estimó que fue una cosa normal del juego, los basquetbolistas son seres humanos con reacciones, viven momentos de frustraciones durante el partido, y Emeka no se pudo aguantar cuando le ordenaron salir de la duela.
“Todo estuvo dentro de lo normal, fue un equipo profesional”, insistió.
Faltó pretemporada
El presidente de Algodoneros aceptó que les hizo falta el trabajo de pretemporada, pues hubo jugadores que llegaron después de lo planeado, entre ellos Emeka Okenwa y Chad Allen, además de los cambios de última hora que se vieron obligados a realizar.
“Fue una pretemporada corta, para el 2004 se contempla realizar un trabajo de preparación de un mes cuando menos, con plantel completo”, adelantó.
En el 2004 esperan lograr la naturalización de Nick Jones Velázquez e Issac Gildea, trámite que llevan a cabo en la delegación estatal del Instituto Nacional de Migración (INM), con sede en la ciudad de Saltillo.
Mexicanos confiables
El directivo considera que su equipo cuenta con una base de jugadores mexicanos confiables, como Marcos Chávez, Eric Hare, Marco Aurelio Verdejo, Arturo “El Loco” Velasco, Freddy Arcobedo, Óscar Yander Hernández, los novatos Ricardo Valdez y Miguel Ángel Sandoval.
“Marco Aurelio Verdejo demostró que es un gran jugador, Freddy Arcobedo los minutos que entró aportó a la defensiva, Óscar Yander Hernández cuando había que darle pausa al equipo, lo hizo de manera inteligente”.
La aparición de Ricardo Valadez y Miguel Ángel Sandoval la calificó como una grata sorpresa, cuando se requirió de sus servicios jugaron con gran serenidad, como si lo hubieran hecho toda la temporada, fueron piezas importantes en el triunfo frente a Correcaminos Victoria en el último juego.
Afirmó que los dos novatos van a continuar con el equipo la próxima temporada.
Una cosecha pobre
Algodoneros consiguió tan sólo cuatro triunfos de visitante, Ganem Pérez atribuyó la falta de productividad en patio ajeno, a que los jugadores cayeron en una desconfianza total, estaban mal mentalizados, salían predispuestos a perder, tan pronto les sacaban una ventaja de diez puntos, el equipo se caía.
“Fue algo que no pudieron superar, las cosas no se daban en las giras, resultó difícil superar la mentalidad derrotista, perdíamos el ritmo de juego y la concentración, espero que en el 2004 no vuelva a suceder esto”.
Mencionó que durante los cuatro años de vida del equipo, nunca se había tenido una racha de siete partidos sin ganar, como aquella que inició en el Auditorio Municipal cuando perdieron contra Santos de San Luis Potosí, el sábado 27 de septiembre.
Después fueron seis juegos de visita, de los cuales no ganaron uno solo, perdieron frente a Fuerza Regia, Correcaminos Matamoros, Correcaminos Victoria, Tecos de Guadalajara, Zorros de Morelia y Tuberos de Colima.
La mala racha se cortó el 14 de octubre, cuando recibieron a Panteras de Aguascalientes, equipo al que derrotaron 97 a 94.
Las únicas cuatro victorias de visitante fueron contra Halcones de la Universidad Veracruzana, Tuberos de Colima, La Ola Roja y Santos de San Luis Potosí.
Responde la afición
Se mostró contento con la respuesta del público durante la temporada, “es una afición que se entrega, siempre apoyó al equipo”.
Recordó que en el último encuentro, al silbatazo final, las 2,500 personas que asistieron esa noche se pusieron de pie para ovacionar a los jugadores, la gente bajó a la duela para agradecerles el esfuerzo hecho durante la temporada y a desearles suerte en el 2004.
“A pesar de no haber calificado al playoff, la afición quedó contenta con el desempeño de Algodoneros, pues en casa siempre se entregó, ganó varios partidos en finales no aptas para cardiacos”.
El arbitraje
El talón de Aquiles de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional es el arbitraje, al respecto manifestó que es una de las principales preocupaciones para la próxima temporada.
“Se buscará traer árbitros de la NBA para que den clínicas a los jueces mexicanos, sabemos que son honestos, pero como seres humanos no están exentos de cometer equivocaciones”.
Estimó que les falta capacitación, se necesitan árbitros jóvenes, que no le tengan temor a los jugadores de jerarquía, que sean parejos con todos.
“Faltarle al respeto a un árbitro es algo indebido, quien lo haga, debe hacerse acreedor a una falta técnica”, advirtió.
Descartó por completo que el arbitraje haya influido para que Algodoneros no calificara al playoff.
Más patrocinios
Reconoció que gracias al apoyo de los patrocinadores se pudo sacar adelante la temporada 2003, pero es necesario buscar más para consolidar al equipo.
“Se han tocado muchas puertas, lamentablemente en algunas empresas la visión por el basquetbol profesional no está muy clara, sin embargo, confiamos en contar con un mayor número de patrocinios para el próximo torneo”.
Incluso, buscará patrocinadores foráneos para tratar de tener un mayor apoyo, de antemano sabe que las grandes compañías tienen muchos compromisos, pero va a seguir tocando puertas en busca de una respuesta favorable.
Futuras contrataciones
El directivo anunció la contratación de Jorge Rochin para la temporada 2004, es un jugador con el que se tienen pláticas adelantadas para adquirir su carta.
Jorge Rochin es originario de Hermosillo, Sonora, jugó en la temporada 2002 con Fuerza Regia de Monterrey, formó parte de la Selección Nacional que participó en el Centrobasket, celebrado en junio pasado en Culiacán, Sinaloa.
Iba a participar en el Torneo Preolímpico de Puerto Rico, desafortunadamente se fracturó la mano derecha y no pudo asistir.
Su estatura es de 2.04 metros, pesa 110 kilos, es un jugador fuerte, anota puntos, recupera balones y pelea bien debajo del tablero.
Aparte de Rochin tiene contemplada la contratación de otro jugador mexicano importante, con el que se cerrará este renglón, pues los elementos nacionales que están en el plantel se ganaron el derecho a repetir.