Lady Ángel, lucha por su familia

Lady Ángel, es una bella mujer lagunera que un buen día decidió tomar el fascinante camino a la lucha libre profesional y aunque reconoce que lograr posicionarse en este deporte-espectáculo no ha sido fácil para ella, afirma no arrepentirse de ello, ya que finalmente es un medio que le ha servido para hacerle frente a la vida y sacar adelante a sus cinco hijos.

Recuerda la gladiadora originaria de Ciudad Lerdo que hace años quedó viuda y tras superar el momento crítico de esta situación, decidió tomar al toro por los cuernos a fin de lograr sobreponerse a la adversidad y cumplir con la gran responsabilidad de sacar adelante a sus hijos, ya sin el apoyo de quien fuera su marido y compañero.

Hija de “Thunder Blue’’, a quien vio luchar desde niña en algunas arenas laguneras, afirma que fue su ídolo e inspiración, de ahí que llegado el momento de tomar una decisión trascendental para su vida, decidiera seguir sus pasos. Empezó a entrenar en 2004, al lado de los exóticos Sexy Libra y Sexy Francis y otros compañeros.

Un año después debutó en el profesionalismo en la Arena Torres, escenario lerdense ubicado en la colonia Las Cumbres. Ahí, hizo equipo con Sexy Libra para enfrentarse a la dupla de Dulce Paola y Ángel del Cielo, siendo ese combate donde comprobó tener la vocación de luchadora, un deporte al cual se encuentra consagrada desde hace seis años, mismo que le ha permitido moldear su carácter y determinación para alcanzar todas sus metas.

Madre de cinco hijos: Christopher Alberto, Karen Alejandra, Gerson Alan, Juan Jesús y Estefany Carolina, asegura que su vida es una auténtica lucha diaria por lograr sostener a sus hijos, los que a medida que crecen resultan más demandantes en atenciones, de ahí que cada día esté más consciente de la importancia de su papel como madre y proveedora de su hogar, de donde obtiene toda la energía que requiere para salir adelante, no sólo sobre el ring, sino en la vida diaria.

Aunque pareciera que su entrada a la lucha libre fue la solución a sus problemas, debió pasar cerca de cuatro años retirada, luego de sufrir un terrible accidente automovilístico que casi le cuesta la vida y aunque los pronósticos fueron de lo más desalentadores, al temerse por su vida, logró superarlos “Tuve 17 operaciones en una de mis piernas en un lapso de dos años, tiempo en el que recibe todo el apoyo de mis amigos y compañeros’’.

Se pensaba sería casi imposible que volviera a la lucha libre profesional y nuevamente los malos augurios fueron superados, teniendo ahora alrededor de un año de haber vuelto a los encorados, donde asegura, está dispuesta a aprovechar esta segunda oportunidad que la vida le ha regalado.

“Como madre estoy para apoyar a mis hijos, hasta donde ellos quieran llegar, creo que esa mi meta, espero verlos realizarse como profesionistas y seres humanos de bien; sería una gran satisfacción verlos realizarse y triunfar en lo que más les guste hacer, siempre y cuando sean actividades que sirvan y ayuden a sus semejantes’’.

“Yo estudié hasta la preparatoria y luego me di cuenta la falta que me hizo y me hacen falta los estudios que no terminé, así que si uno de mis hijos quiere ser luchador, lo apoyaré siempre y cuando me entregue un título universitario, mismo que le garantice estar listo para afrontar la vida diaria en caso de que las cosas no le resultan dentro del deporte”.