Los rayos del sol veraniego hacían su trabajo, mientras el encargado de dirigir a los que acudían a depositar su voto, bajaban del auto de alquiler que los había recogido en una colonia popular. Les habían invitado a un almuerzo a base de barbacoa o menudo. Antes se estilaba una torta y un refresco. Las mismas artimañas de siempre, con el añadido esta vez de una tarjeta que autoriza a su dueño a cobrar una suma de dinero, siempre y cuando gane tal o cual candidato. No hay problema, pues desde la anterior elección quedó legitimado el acarreo masivo de votantes. Los aspirantes no se ruborizan en obtener un triunfo a base de compra de votos. Esa es la democracia de hoy en día: el que tenga más saliva tragará más pinole, decía un antiguo refrán. Es el dinero el que hará la diferencia. En un futuro no muy distante ya no se contarán papeletas sino billetes de que dispongan los operadores de un candidato.
Se prevé será el monto de las cuentas de cheques las que decidirán quién gana o quién pierda (¿dónde he oído eso antes?) Alzando las cejas los lectores de este periódico, me pueden cuestionar ¿qué no ha sido siempre así?, el último proceso electoral en donde el voto fue respetado, comentan, fue cuando se eligió a Francisco I. Madero y a José María Pino Suárez, Presidente y Vicepresidente de la República. A los dos, así les fue.
En una calle posterior, aledaña al presidio de triste memoria, el Palacio de Lecumberri, fueron asesinados a mansalva el 22 de febrero de 1913. Al parecer la democracia fue una luz agonizante. Aunque no es posible creer que haya sido flor de un día. Madero comentó: "como político he cometido dos graves errores que son los que han causado mi caída, haber querido contentar a todos y no haber sabido confiar en mis verdaderos amigos". En su ensayo el gobierno de Madero y la Decena Trágica, el maestro Jesús Silva Herzog apunta que: "al mártir de la democracia también le faltó un mayor conocimiento de los hombres y de los problemas del país". Bien, pero ¿en qué consiste la democracia?: el término tiene su origen en el antiguo griego y se forma a partir de los vocablos "demos" (pueblo) y "kratos" (gobierno). Se dice que democracia es una forma de convivencia social donde todos los habitantes son libres e iguales ante la ley. Platón decía que la democracia es la forma de gobierno de la multitud; en tanto Aristóteles hablaba de que la democracia, era el gobierno de los más. En la praxis la democracia es una forma de gobierno y de organización de un Estado.
En guerra de tarjetas, los candidatos que tienen mayores posibilidades, PRI y PAN han promocionado la entrega de tarjetas, lo que a mi parecer es un error.
En efecto, el que vota en estos tiempos no lo hace por la suma que se le promete, hace tiempo que abrió los ojos dándose cuenta que es de la tesorería de donde se sacarán las sumas o sea que los candidatos no sueltan prenda mientras no tengan acceso a las arcas donde se guarda "la papeliza"; de sus bolsillos ni un centavo mochado por la mitad, nomás eso faltaba.
Son pagarés cobrables al momento en que se les deje meter ambas manos en los dineros públicos. O sea, vistas bien las cosas les entregarán, en tal caso, dinero del mismo pueblo. La prensa da la noticia de que la tarjeta MásMejor ofrece apoyos sociales con valor de hasta 5 mil al mes, mientras que La Cumplidora promete mil pesos al mes -en ambos casos siempre y cuando ganen- (si no ganan pos' no), las sumas de cinco mil y un mil cubrirán el monto solamente un mes. A menos que me equivoque esta será la cantidad en una sola exhibición; nada más. Para armar redes de movilización de electores se contratarán taxis a razón, se dice, de mil quinientos pesos por "piocha", es decir por cada traslado de electores al lugar de la votación.
Los partidos denuncian mano negra en el proceso, el colmo, ofrecen dinero para que simpatizantes abandonen concentraciones retirando gente que asiste a los mítines. Han llegado al extremo de publicar desplegados, confundiendo a los periódicos con mesas del ministerio público. Sin que, posteriormente le den seguimiento a los hechos denunciados. Hay acusaciones inverosímiles, por ejemplo en las que se da por sentado que habrá robo de urnas o la que se hace consistir en que vendrán personas de otros estados para intimidar a votantes en las casillas, quienes en realidad suelen ser personas invitadas encargadas de vigilar el sano desarrollo de la votación.
Flota en el ambiente, cada día que pasa con mayor fuerza, que la falta de limpieza produzca enfrentamientos entre los partidarios de cada uno de los candidatos. He oído, cada vez con mayor exaltación, de que no hay un juez que le dé legalidad al proceso, pues son muchas las violaciones a las normas reglamentarias que regulan sin que se vea se tomen medidas que le den certidumbre al proceso.
Repetiré con Julio César, que se aprestaba a cruzar el Rubicón, Alea Jacta Est, (La Suerte está Echada), locución latina, que significaba que él había tomado el riesgo y había pasado el "punto de no retorno", como el jugador que ha apostado todo a una tirada de dados, es decir que él no podía retroceder de lo que había hecho. Hoy en día la frase significa dar un paso irrevocable, generalmente de riesgo o confrontación.