Las autoridades neozelandesas cancelaron la alerta de tsunami dada a raíz del sismo de 7.8 grados de magnitud en la escala abierta de Richter que golpeó hoy las isla Kermadec, a unos 800 kilómetros al este de Nueva Zelanda.
En un mensaje divulgado por las televisiones y emisoras de radio del país, el Servicio de Protección Civil indicó que "no se espera una amenaza por tsunami en tierra firme".
Las autoridades neozelandesas pidieron a la población de la costa este que se mantenga alejada del litoral, a donde se estima que las olas llegarán debilitadas y con una altura máxima de metro y medio.
David Coetzee, portavoz del Servicio de Protección Civil, dijo a Radio Nueva Zelanda que resulta improbable que cause daños en tierra.
El portavoz señaló que el mayor riesgo una vez que llegue a Nueva Zelanda será para los barcos de los muelles de la costa oeste del país, a cuyas tripulaciones recomendó adoptar medidas de seguridad.
El sismo se produjo a 48 kilómetros de profundidad y a unos 12 kilómetros de la isla de Raoul, en las Kermadec.
El Centro de Alertas del Pacífico, por su parte, extendió el aviso de tsunami a Tonga y las islas Kermadec.