Se dice que Grupo Modelo podría retomar las riendas de los Guerreros
MEXICO, DF.- La nueva telaraña federativa se llama Santos Laguna.
Será el tema prioritario de la junta de Comité Directivo programada para el próximo lunes, y de la que ya se han comenzado a desprender sospechas: el Grupo Modelo podría planear un rescate del club, en virtud de que el proceso de negociación con el empresario Carlos Ahumada no ha culminado, según palabras de Guillermo Cantú, ex presidente del equipo y enlace del Grupo Modelo.
La tensión creció por los problemas políticos de Ahumada, cuya afiliación ante la Federación Mexicana de Futbol (FMF) no se consumó.
A la presión de varios directivos, encabezados por Rafael Lebrija y Jorge Vergara, en el sentido de que debe investigarse el origen del dinero con el que Ahumada adquirió a Santos (Primera División) y León (Primera A), se sumó ayer la voz de Alberto de la Torre, presidente de la FMF: “Lo que propondría es un análisis riguroso sobre la conveniencia de que el señor Ahumada entre al mundo del futbol. Es una situación delicada, porque no debemos permitir la inclusión de gente que nos pueda acarrear problemas”.
El show del empresario podría desplomarse, porque nunca ha estado inscrito oficialmente como dueño de los santistas.
En la anterior junta de presidentes, Carlos Ahumada recibió el apoyo del 80 por ciento de los equipos, algo a lo que obliga el reglamento. Sólo faltaba la ratificación del Consejo Nacional, que tentativamente se daría el 15 de marzo.
Pero el concierto de vídeos secretos alteró el panorama...
“Para la Federación, los dueños son los de antes. Así de sencillo: Ahumada no está afiliado y hasta el momento nada tenemos que arreglar con él”, añadió De la Torre.
Hace dos meses, el club Santos envió una solicitud de afiliación a la FMF, la cual fue rechazada porque no reunía todos los requisitos que marca el reglamento. “No pasó y el trámite sigue en suspenso”.
En el contexto de escándalos, el líder federativo reiteró su idea de incluir artículos al reglamento encaminados a evitar que “personas de dudosa reputación” participen en el negocio futbolístico.
Por su parte, el presidente lagunero, Alberto Canedo, reconoció un ambiente de inquietud en torno al equipo, en especial por el aspecto financiero.
“No sabemos si las circunstancias actuales tendrán repercusión en el flujo de dinero. Es una situación que no podemos asegurar, igual y no sucede nada”. Añadió que, como la mayoría de los equipos del futbol mexicano, Santos no es autofinanciable y en caso de no recibir apoyos adicionales, la institución está destinada a la quiebra en uno o dos meses.
Con voz nerviosa, Canedo dijo que no se ha comunicado en los últimos días con Ahumada (con quien tenía reuniones constantes hasta que Edgardo Codesal fue nombrado director deportivo).
Y el ex jefe de los silbantes prefirió apagar su celular y negarse en casa. “Se fue a León (Guanajuato)”, dijeron.
Rafael Lebrija, presidente del Toluca y uno de los dirigentes más polémicos del balompié nacional, exigió a la FMF tomar cartas en el asunto: “No podemos quedarnos con los brazos cruzados, hay que llegar al fondo del asunto. Está prohibido para la Federación hacerse a un lado, y menos si se trata del dueño de dos equipos. Hay que investigar”.
-¿Indagar qué? -Cómo logró comprar a los dos clubes, con qué dinero.