Un factor de riesgo es todo aquello que afecta la probabilidad de que se padezca una enfermedad. Los distintos tipos de cáncer tienen factores de riesgo como la exposición, por ejemplo, la exposición a la luz solar intensa (cáncer de piel) o el fumar (cáncer de pulmón). Los factores de riesgo para el cáncer de mama incluyen:
Género: El hecho de ser mujer es el principal riesgo de padecer cáncer de seno
Edad: El riesgo de padecer cáncer de mama se incrementa conforme la edad aumenta.
Genética: Alrededor del 5 al 10 por ciento de los casos de cáncer de seno son hereditarios.
Antecedentes familiares de cáncer de mama: El riesgo de cáncer de mama es mayor entre las mujeres cuyos familiares directos tienen esta enfermedad.
Raza y origen étnico: En general, las mujeres de raza blanca tienen una probabilidad ligeramente mayor de padecer cáncer de seno que las mujeres de raza negra.
Tejido mamario denso: Las mujeres con mamas densas tienen un mayor riesgo de cáncer que las de mamas menos densas.
Afecciones benignas del seno: Las mujeres diagnosticadas con ciertas afecciones benignas podrían tener un riesgo aumentado de cáncer de seno.
Períodos menstruales: Las mujeres que han tenido más ciclos menstruales, debido a que comenzaron a menstruar temprano y/o que experimentaron tarde la menopausia tienen un riesgo ligeramente mayor de padecer cáncer.
Antecedente de radiación al tórax: Las mujeres que siendo niñas o adultas jóvenes recibieron radiación en el área del tórax como tratamiento contra otro cáncer tienen un riesgo significativamente mayor de padecer cáncer.
Número de hijos: Las mujeres que no han tenido hijos o que tuvieron su primer hijo después de los 30 años tienen un riesgo de cáncer de seno ligeramente mayor.
Control de la natalidad: Las mujeres que usan anticonceptivos hormonales tienen un riesgo ligeramente mayor de tener cáncer que aquellas que nunca los han usado.
Lactancia: Estudios sugieren que la lactancia puede disminuir ligeramente el riesgo de cáncer de seno, especialmente si se prolonga por 1½ a 2 años.
Consumo de bebidas alcohólicas: Este hecho está claramente asociado con un aumento en el riesgo de padecer cáncer de seno. El riesgo aumenta con la cantidad de alcohol consumido.
Sobrepeso u obesidad: después de la menopausia aumentan el riesgo de cáncer.
Actividad física: Existe evidencia de que la actividad física en forma de ejercicio reduce el riesgo de cáncer.
Químicos en el ambiente: Los compuestos del ambiente que contienen propiedades semejantes a las del estrógeno. Por ejemplo, las sustancias encontradas en algunos plásticos, ciertos cosméticos y productos del cuidado personal, pesticidas y PCBs.
Humo del tabaco: Estudios han reportado que fumar excesivamente por un tiempo prolongado está asociado con un mayor riesgo de cáncer de seno.
Factores controversiales: Desodorantes, sostenes, aborto provocado e implantes mamarios.
Si usted tiene uno o varios factores de riesgo, no necesariamente padecerá la enfermedad. La mayoría de las mujeres que tienen factores de riesgo de cáncer de seno no lo padecen, mientras que otras que lo padecen no los tienen de manera aparente. Por lo tanto, es de suma importancia la autoexploración y acudir regularmente con su médico para prevenir el desarrollo de esta neoplasia.
*Toxicólogo y Endocrinólogo de la Reproducción. Profesor de Fisiología y Jefe del Centro de Investigación Biomédica de la Facultad de Medicina de Torreón, UA de C.
La próxima colaboración será del Dr. Benjamín Serrano Gallardo, doctor en ciencias.