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"Fin de año 2008" El desfile

German de la Cruz Carrizales

Como cada año que empieza, nos preparamos para ir al desfile. Ahí nos reunimos la  comunidad completa para ver cual fue el resultado del año que concluye, muchas veces las familias ya no están completas pues algún miembro se ha ido a ese viaje sin regreso o algunas parejas se han separado, o algún acontecimiento los aleja por malos entendidos en donde se han construido muros tan altos que separan sus vidas, el caso es que se les ve tristes y con una gran pena, sin embargo también hay familias que sonrientes y alegres por el éxito que les ha brindado el año que concluye saludan entusiasmadas a los presentes.

Nos apuramos para llegar temprano y ocupar un buen lugar. Los organizadores del desfile, corren de un lugar a otro concluyendo los últimos detalles, gente con papeles en las manos, las calles limpias y resplandecientes, edecanes ocupando sus lugares para auxiliar a la comunidad en el acomodo de sus lugares. Las familias van llegando una a una, algunas sentándose en primera fila otras prefieren estar atrás y otras al final del estrado como queriendo pasar desapercibidas. Con atención vemos la llegada de la familia Adargas, a quien la comunidad entera respeta y admira. Integrada por el Señor Soid, el Señor Esoj, la Señora Airam y su hijo Susej, conocemos por todas las dificultades que ha tenido que pasar esta familia y que a pesar de las adversidades han sido una familia íntegra, ejemplo para toda la comunidad. El Señor Soid ya de edad con su cabello cano y su barba bien cuidada, su mirada noble es un hombre justo y sabio a quien la comunidad saluda con gran respeto y cariño. Acompañado del Señor Esoj y su esposa Airam a quien lleva del brazo y de quien se siente muy orgulloso. Todos sabemos del  gran corazón que tiene esta gran mujer, y del trabajo tan importante que hace para la comunidad, preocupándose por todas y cada una de las familias, sobretodo de aquellas que pasan por grandes dificultades. Susej es un hombre carismático, trabajador y muy en contacto con la comunidad, los niños lo adoran y su sencillez lo hace a quienes lo conocen al mejor de los amigos, el siempre dice “los extraños, no son sino amigos que no han sido presentados”.

La familia Adargas ocupa su lugar especial, justo frente a la tribuna de los representantes de la comunidad al otro lado de la calle. Pero en toda comunidad siempre hay alguien que no esta de acuerdo con las cosas o aquellas personas que se inclinan por hacer negocios en la oscuridad o tener conductas que no van de acuerdo con todos y alguien de quien se cree que encabeza este grupo es el señor Lam quien llega con sus vestidos ostentosos y joyas extravagantes acompañado a diferencia de las familias, por un grupo de guardias no muy bien encarados a quienes los niños les huyen y dan miedo, acercándose más a sus padres.

La banda musical en este ambiente de fiesta y con un lleno completo en las tribunas hace silencio, anunciando el comienzo del desfile. Todos en sus lugares están atentos a las palabras que el representante de la comunidad dice: “Familias de esta comunidad, estamos por comenzar nuestro desfile anual, para dar la bienvenida al nuevo año y para ver los acontecimientos que el año que termina nos ha dejado, pero en esta ocasión veremos una reseña de lo que ha pasado en los últimos sesenta años y como las familias hemos participado de ello y como demos actuar para el año que comienza” bienvenidos todos y que comience el desfile.

La banda musical comienza a tocar y todo se vuelve un ambiente de fiesta, expectantes para ver los carros alegóricos y los temás que nos tienen preparados.

Los narradores anuncian la presencia en este desfile de los conflictos que la comunidad tuvo hace sesenta años y los carros adornados y representados con este motivo captan nuestra atención completa.......

En la mitad del siglo pasado el mapa del planeta cambio en varias ocasiones, al terminar la guerra, el mundo se dividió en dos grandes ejes, el este y el oeste: el este representando al comunismo, el oeste al capitalismo. Entonces comenzó una nueva guerra, la guerra fría: sus características; tensión, amenazas, presión, armamentismo como practica y como filosofía. El comunismo Estalinista se avergonzó de si mismo en 1956 cuando Nikita Khrushchev denuncio los horrores cometidos por Stalin, pero Khrushchev continuo en la practica la política de expansión ideológica del comunismo soviético y estuvo a punto de provocar la tercera guerra mundial en 1962 cuando envío mísiles nucleares al régimen de Fidel Castro en Cuba que apenas lleva tres años en el poder. La republica Popular China de Mao Tse Tung se unió a las naciones con poderío nuclear. Esta guerra fría se extendió durante cuarenta y cinco años, hasta que llegó Mijail Gorvachov al poder en la Unión Soviética. La carrera armamentista entre los dos grandes bloques significo un gasto promedio de veinte mil millones de dólares por cada año, en la post guerra en cuarenta y cinco años.  La situación llego a tal extremo que en 1984 la Unión Soviética tenia apuntados mísiles con vente mil ojivas nucleares contra los Estados Unidos, y los Estados Unidos tenían apuntados mísiles con veinticinco mil ojivas contra la Unión Soviética. La capacidad de estas armás podía destruir a trescientos planetas como la tierra. Muchos piensan que durante la vida de la Unión Soviética no hubo una tercera guerra mundial porque hubo ese equilibrio, las armás eran demásiado poderosas, nunca hubo tal guerra nuclear, pero si accidentes, tanto en los Estados Unidos como en al Unión Soviética. El más grave en 1986 cuando un reactor de la planta nuclear de Sernovil en Ucrania, estallo y provoco la muerte de  doscientas cincuenta mil personas y daños irreversibles a miles de hombres, mujeres, niños y campos.

Desde su llegada al poder en 1985, Mijail Gorvachov comenzó con el desmantelamiento del comunismo soviético, dejo de sostener política, económica y militarmente a los gobiernos comunistas de Europa del Este y a Cuba. El 9 de noviembre de 1989, un funcionario alemán anunciaba la apertura de todos los puestos fronterizos con Alemania occidental y otorgaba visa a quienes quisieran viajar. Esto significaba la caída del muro de Berlín, que había estado ahí veintiocho años. Un año después, el 3 de octubre de 1990 las dos Alemanias se unificaron.

En 1991 la Unión Soviética dejo de existir, el presidente Boris Yeltsin de la Federación Rusa en una reunión con los dirigentes de las otras catorce republicas soviéticas anuncio el surgimiento de la comunidad de estados independientes.

Así en la década de los noventas, el mapa del mundo volvió a transformarse, se agregaron catorce países de la Ex Unión Soviética  y cinco de la Ex Yugoslavia, la republica Checa y la república Eslovaca. Se logro lo que parecía imposible, la paz entre Israel y Palestinos, una paz ensombrecida por ataques terroristas, pero paz al fin y al cabo.

En 1993, otro milagro, cayó el régimen de la Pardja y de Sudáfrica y un año después Nelson Mandela gana las elecciones y se convierte en el primer presiente negro de Sudáfrica. A sesenta años del fin de la guerra, ¿en que estado se encuentran los países perdedores? Alemania, perdedora es una superpotencia económica en Europa su moneda anterior, el marco, fue una de las divisas más fuertes del sistema monetario mundial y base fundamental para la Comunidad Económica Europea el euro. Japón, derrotado, el otro gran perdedor de la segunda guerra mundial es de los primeros países exportadores de Asia, sus reservas internacionales superaban los ciento veinte mil millones de dólares.

A sesenta años de la terminación de la segunda guerra mundial, los acontecimientos históricos no se detienen, pero seria deseable en este inicio del 2009, aunque sea un sueño imposible, que el hombre hiciera una pasusa en su camino, para meditar, para examinar el pasado, para recordarlo, para no olvidarlo, a fin de no incurrir en los mismos errores trágicos. La segunda guerra mundial industrializo la muerte, no solo de combatientes, sino de millones de inocentes. Se creó un nuevo tipo de delito que habría de llamarse genocidio y que tiene su ejemplo en el holocausto. Toda la precisión, toda la técnica de la industria avanzada se puso al servicio del terror, para asesinar a millones de inocentes, sin más delito que otra religión, otra opinión, otro origen. Aunque no en la misma magnitud estos sesenta años de supuesta paz, han producido múltiples genocidios regionales. En estos sesenta años vimos caer  desde el báltico hasta el adriático una cortina de hierro y la vimos levantase después de millones de muertos y perseguidos, en una represión que ahora parece inútil y siempre lo fue.

 

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“QUIEN NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”

German de la Cruz Carrizales

  Torreón, Coahuila. México

                 MMIX

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