Luego de rumores y especulaciones, la verdad apareció. Alejandro Irarragorri anunció a Marc Crosas como el quinto extranjero santista, el refuerzo esperado.
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En su boletín de prensa, Santos Laguna calificó como una contratación “histórica para el futbol mexicano” la del español, surgido de las fuerzas básicas del “Barça”.
Y yo me pregunto, ¿qué de “histórico” tiene la llegada de un jugador de 24 años que no ha logrado consolidarse en algún equipo?
Se entiende que en el cuadro azulgrana tuviera pocas oportunidades (porque detrás de él estaban Xavi, Iniesta, Busquets). De ahí, su paso por el Lyon fue efímero. Quizá en el Celtic de Escocia y el Volga ruso tuvo más regularidad, pero ¿por qué emigrar de Europa a un futbol inflado en mercadotecnia y no en calidad?
Seguro que Crosas debe traer buena escuela, experiencia y ganas. Su forma de expresarse hasta ahora debe llenar de esperanza a los aficionados albiverdes. Pero hasta aquí, ¿dónde está lo histórico de su llegada?
¿Porque es español, surgido del Barcelona, venido de Europa? O, ¿qué entendemos por contratación histórica?
La palabra “histórico(a)” refiere a la historia. Historia es un hecho pasado. Pasado es todo lo que pasa. Tomemos la connotación de histórico mejor como algo memorable, digno de recordar.
Desde esa perspectiva, la contratación de Crosas para el Santos Laguna del futbol mexicano todavía no tiene nada de histórica.
Es un futbolista que no ha jugado ni un minuto en México. Crosas es (todavía) un completo desconocido para una gran mayoría. Sólo al paso de los años sabremos si la contratación fue histórica o no. Veremos entonces.
Yo me despido, chao!