La amistad es el tesoro más grande del mundo. Igual que una niña cuida, peina, limpia, juega y cambia a su muñeca no esperando que ella le hable y le diga “te amo”, así la amistad solo se da sin esperar recibir nada a cambio.
Tengo amigos que no saben cuánto son mis amigos.
No perciben el amor que les profeso y la absoluta necesidad que tengo de ellos.
La amistad es un sentimiento más noble que el amor, es que permite que el objeto de ella se divida en otros afectos, en cuanto el amor tiene intrínseco los celos, que no admite la rivalidad.
Y yo podría soportar, sin embargo no sin dolor, que hubiesen muerto todos mis amores, mas enloquecería si muriesen todos mis amigos!
Hasta aquellos que no perciben cuanto son mis amigos y cuanto mi vida depende de sus existencias...
A algunos de ellos no los frecuento, me basta saber que ellos existen.
Esta mera condición me llena de coraje para seguir enfrente de la vida.
Más, porque no los frecuento con asiduidad, no les puedo decir cuánto gusto de ellos. Ellos no lo creerían.
Muchos de ellos están leyendo esta crónica y no saben que están incluidos en la sagrada relación de mis amigos.
Mas es delicioso que yo sepa y sienta que los adoro, aunque no se los diga y no los frecuente.
Y a veces, cuando los frecuento, noto que ellos no tienen
noción de como me son necesarios, de como son indispensables a mi
equilibrio vital, porque ellos hacen parte del mundo que yo, trémulamente,
construí y se tornaron en fundadores de mi encanto por la vida.
Si uno de ellos muriera, yo quedaría torcido para un lado.
Si todos ellos murieran, ¡yo me desmoronaría!
Es por eso que, sin que ellos sepan, yo rezo por su vida. Y me avergüenzo, porque esa súplica está, en síntesis, dirigida a mi bienestar. Ella es, tal vez, fruto de mi egoísmo.
A veces, me sumerjo en pensamientos sobre alguno de ellos.
Cuando viajo y estoy delante de lugares maravillosos,
me cae alguna lágrima porque no están junto a mí, compartiendo aquel placer...
Si alguna cosa me consume y me envejece, es que la rueda furiosa de la vida no me permite tener siempre a mi lado, habitando conmigo, andando conmigo, hablando conmigo, viviendo conmigo, a todos mis amigos; y, principalmente, los que solo desconfían o tal vez nunca van a saber que son mis amigos!
La gente no hace amigos, los reconoce. Después de todo, los extraños, no son sino amigos que no han sido presentados...
¿Y usted qué opina?
Participe en el programa de Lala, “Héroes que inspiran vidas”, proponiendo a esos héroes anónimos en la dirección electrónica [email protected]
(Le comparto este tema: “Amigos para Siempre”). Haga clic en la dirección de abajo:
http://www.youtube.com/watch?v=rsvVzAn_qlI
Si aún no ha leído el artículo “ Amarse con los DEFECTOS!!!”, se lo recomiendo en:
http://blogsiglo.com/archivo/439.html
“Se feliz, porque la piedra nunca es tan grande, porque las injusticias acaban pagándose, porque el dolor se supera, porque la verdad… insiste, porque el coraje te levanta, porque el miedo te fortalece, porque los errores te enseñan y porque nadie es perfecto.
La vida da una segunda oportunidad para todo y pone a cada uno donde debe estar”.
"Despertar...es"
Un encuentro contigo mismo
Un libro que una vez
que inicias, no podrás dejar de leer.
“QUIEN NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”
Germán de la Cruz Carrizales
Torreón, Coahuila. México
MMXII