Del tamaño de la ilusión siempre será la decepción. El coraje y la sensación de que el Santos era desmantelado se cambió por una gran ilusión cuando los nuevos fichajes empezaron a darse, durante ese proceso, voces de todos lados incluso de prensa a nivel nacional, cambiaban la palabra desmantelamiento por una que yo considero la adecuada: renovación. También se unificó el criterio de que dicha renovación era un proyecto del técnico Pedro Caixinha para quedarse con todo el poder dentro de su equipo, lo anterior dicho casi siempre en un tono inquisidor, yo me pregunto, ¿que técnico no busca mandar a su gusto? ¿Que técnico no arma un plantel a su manera si le dan la oportunidad?
No veo nada de malo en que Caixinha haya hecho los movimientos que hizo, finalmente el será el responsable si los resultados no llegan, yo lo que vería muy mal, sería que Don Pedro hubiera permitido contra su voluntad la salida de los que se fueron y se hubiera mantenido en el cargo sólo por cuidar la chamba, ahí si estaría ya decepcionado del portugués y aseguraría un fracaso de Santos en este torneo. Lejos de lo que se dice, Caixinha no buscó vengarse de nadie cuando dio la lista de jugadores que no entraban en sus planes, él simplemente armó un proyecto para este torneo que incluía una renovación y éste le fue aceptado por su directiva.
El viernes pasado Santos perdió en casa y el descontento reinó, es normal a nadie le gusta perder, sin embargo, las críticas van todas contra el entrenador y mucho se debe a la sensación que la renovación santista dejó. No será fácil manejar la presión para Don Pedro, él será el culpable de todo lo malo que pase ahora en adelante en el equipo albiverde y sólo un factor menor en todo lo bueno, ni modo, la suerte está echada y así es el futbol. La calma tendrá que venir de dueño y directivos si la cosa se tarda en funcionar, finalmente Santos es un equipo nuevo, con muy buenos jugadores pero nuevo.
DESCUENTO: Gracias a todos los culpables para que esta columna se publique ya en El Siglo de Torreón. Espero estar a la altura.
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