Defender Procesos

Cuando Alemania gana el Mundial de 2014, su técnico Joachim Löw declara que todo empezó desde el 2004 con Jurgen Klinsmann; "Esto es la culminación de un proyecto de cambio generacional, un proyecto que sabíamos que incluso nos podía costar no ganar nuestro Mundial en casa en el 2006". Más claro, imposible. En Alemania se hacen proyectos sin importar el costo deportivo, aquí en México perder un torneo (que igual casi siempre perdemos) le cuesta el puesto al seleccionador y los proyectos se van al carajo. Esto ya se volvió una costumbre, un show que todos disfrutan y piden, parece que disfrutamos con el espectáculo de quitar y poner entrenadores, lo que más risa da es que si le preguntas a quien sea si éste es el camino ideal para ganar, todos te van a contestar que no, pero si la siguiente pregunta es si Osorio debería quedarse a pesar de una mala Confederaciones, nadie o muy pocos apuestan por la continuidad del colombiano.

Yo sé que usted me identifica como un "defensor de Osorio" así como en su momento fuí un "defensor de Caixinha". No voy a discutirle, pero sí le explico que lo que defiendo es un proceso cuando quien lo encabeza es una persona con capacidad y trabajadora. Osorio es un técnico cotizado a nivel mundial, su estilo es conocido y admirado por verdaderos técnicos de élite mundial. Lo anterior lo único que garantiza es que el proyecto lo encabeza una persona capaz y a lo que obliga no nada más eso sino el ejemplo alemán, es a que por primera vez deberíamos respetar un proceso. La selección Mexicana hoy, apenas se está acoplando a esta nueva y a veces desconocida forma de trabajar del colombiano, sin embargo, los jugadores están contentos y empiezan a responder. No es casualidad que se vaya en primer lugar después de medio hexagonal prácticamente ya en El mundial y que al campeón europeo se le haya podido empatar y jugarle bien por momentos.

Lo primero que deberíamos tener claro para ganar algo de paciencia con nuestros procesos de selección, es nuestro verdadero nivel como equipo de futbol, el cual es estar entre los 16 mejores, no más, no menos. Estar siempre con el sueño de las hazañas es válido pero a veces esos sueños alimentados por la asquerosa publicidad de las televisoras se convierten en verdaderas exigencias de "por fin hay que trascender", calma, por supuesto que siempre hay que buscar la mejor actuación histórica pero exigirla a lo tonto cortando cabezas como si el entrenador fuera el único culpable no nos va a llevar más que a lo mismo.

Hoy lo mejor para nuestra selección aunque a muchos les moleste es dejar a Juan Carlos Osorio hasta Rusia 2018 y ahí hacer un corte de caja no nada más con el "quinto partido" como boleto a una continuidad. Si no abrimos nuestro panorama futbolístico vamos a seguir atrapados en la misma inercia y show de ahora. Alemania, España, Argentina con Bilardo, ejemplos de que la continuidad es el camino, sobran.

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