Otra vez la porra (el término "barra" es el primer paso para provocar violencia) de Tigres, se ha visto inmiscuida en un episodio de violencia. Ahora fue en Veracruz, la provocación otra vez vino con la famosa "invasión". Sólo en nuestro futbol esa palabra pasa sin ser considerada una clara provocación al "invadido", a la fecha es una palabra que les hace gracia a algunos comentaristas de nivel nacional y por supuesto es motivo de orgullo de los comentaristas regiomontanos. El viernes en Veracruz se unió otro factor: André Pierre Gignac, este gran jugador mostró sus grandes capacidades futbolísticas pero también su gran capacidad de manipulación y provocación, en diciembre engañó a todo el país con una supuesta lesión cervical y ahora nos quiere venir a engañar deslindándose de sus provocaciones a la afición del puerto.
El asunto no terminó con muertos porque dios fue grande, por mera suerte; hoy se ataca otra vez el efecto y no la causa, otra vez los Tigres y toda su maquinaria de enajenados se van a salir con la suya. Lamentablemente el cese de autoridades policiacas o el anuncio de refuerzos en los operativos del Pirata Fuente no van a solucionar la raíz del problema y en un futuro vamos a ver inevitablemente nuestra primer tragedia de proporciones históricas en donde se perderán vidas por un simple partido de futbol. Si, no exagero, su pasado incidente en Torreón no les sirvió para aprender nada, la nación Tigre no entiende nada, si no me cree vea el triste performance del Tuca Ferretti desgarrándose las vestiduras, quedando bien con esa bola de trogloditas, demostrándoles que da la vida por ellos porque son "incomparables", bonita payasada.
Yo desde este pequeño espacio lo seguiré señalando como lo hago desde que comenzaron las "invasiones Tigre"; son principalmente un negocio engaña bobos, son una maquinaria muy bien aceitada por directivos y medios de comunicación pagados, son una bomba de tiempo.
Sin duda en la semana veremos al Ingeniero Rodríguez otra vez defender lo indefendible, mostrando el temor al monstruo que ellos mismos construyeron, defendiendo a delincuentes que él mismo financia. Autoridades de la FMF deben parar esto, el Club Tigres ya no puede aunque quisiera, su porra ya los superó. Si no se actúa hoy lo vamos a lamentar todos.
TWITTER @manyecastil