Ya Váyase, Profe

Profe Osorio, como ya se estará dando cuenta, usted vino a una misión imposible. Si, tiene que ganar, con la selección Mexicana A y B todos los torneos que juegue. Al principio de su proceso le daba risa que le comentaran lo anterior, hoy lamentablemente ha descubierto que no era ninguna broma. Quizá no todos se lo vayan a aceptar pero yo sí, los mexicanos pensamos que de milagro, ligando dos resultados, con algo de heroísmo y suerte podemos hasta soñar con ganar el mundial, lo hemos imaginado, lo hemos simulado en el Play Station, lo hacíamos jugando cuando éramos niños en el patio. Me dirá que en todos los países lo sueñan, tiene razón, la diferencia es que aquí hay una maquinaria de publicidad que nos ha convencido de que es posible. Si no ¿cómo se explica las críticas y desprecio a su aceptable trabajo? ¿Cómo se explica que hoy la sensación de la mayoría es de que la selección está en el hoyo?

Si va líder del hexagonal es porque la CONCACAF está en su peor momento, si queda cuarto en Confederaciones haciendo 7 puntos, ganándole al anfitrión y quedándose a un minuto del tercer lugar que hubiera sido histórico, nada, por las rotaciones nos ganó Alemania, seguramente si contra Nueva Zelanda hubiera repetido cuadro le hubiéramos ganado a Alemania, no se ría, así es la lógica de la mayoría. Hoy se le exige que gane con una selección improvisada la Copa Oro, esta competencia de burla, cuasi delincuencial, torneo que un futbol de élite rechazaría. Participamos en un burdo negocio de la CONCACAF. Cuando llegó usted vio este torneo y los partidos moleros como una oportunidad para ver más jugadores, jaja, no es el primero que lo declara así. Lamentablemente como ya lo ha visto, en los moleros lo matan por "abaratar la camiseta" al llamar jóvenes y en este torneucho con un equipo sin trabajo previo, está obligado a golear a todos, si no sale campeón van a pedir su cabeza.

En el futbol y en la vida, una cosa son los retos y otra el absurdo. Aquí llegamos muy seguido al absurdo. Es absurda la cantidad de partidos que nuestra selección juega, la explicación es sencilla, es una empresa, un negocio que da para todos. Hasta los medios más reventadores mandan a sus reporteros a seguir al TRI, a lo único que van es a correr al técnico, para ellos es un gran negocio el cambio y a usted por más que lo critican no logran que dé los resultados necesarios para irse. Por eso lo revientan hasta por reírse en el palco o hacer una anotación con plumas de distinto color, con usted ya estamos instalados en el absurdo y en el odio, en el complejo. Jamás he visto un proceso con buenos resultados tan atacado, con comentaristas gritando enfurecidos, con encuestas tramposas. Saben que la solución no es que usted se vaya pero ya se les puso, ya no habrá reversa.

Ya mejor váyase, Profe. Perdón pero esto como nunca lo había visto, da vergüenza. Me rebasó.

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