PARA EMPEZAR
DA CORAJE
El día de medirse con un rival de buen plantel llegó el viernes pasado para Santos Laguna. El famoso parámetro válido que muchas voces pedían ya se dio. Santos superó con buenas notas la prueba complicada que es para cualquier equipo de la Liga MX enfrentar a los Rayados de Monterrey. El presente del Santos líder de Almada es inmejorable, el compromiso y el pundonor paga en el futbol y a este equipo le ha dado para tener 15 puntos en 6 juegos, a pesar de fallas del VAR, fallas de goles claros y lapsos de partido inciertos. Con todo y eso Santos es el líder de la competencia y lleva ritmo holgado de liguilla.
Hoy no me voy a meter con el Santos del Profe Almada porque creo que todo está dicho, hoy les voy a platicar la sensación que me dio ver a este Santos superar por momentos con tanta claridad a un plantel como el de Rayados, perdónenme pero sigo recordando con coraje semestres pasados, la Conca y aquella liguilla en donde Santos ni las manos metió contra sus rivales regios, sinceramente me dio mucho coraje, ¿quién fue la mente brillante que pensó que con Chava Reyes, Garnica y Preciado se iba a tener éxito?
No quiero ser ventajista pero todos vimos (menos la directiva) antes de que se tomaran decisiones drásticas que el barco no iba para ningún lado, Rayados y Tigres vapulearon al Santos en liguilla y Concachampions respectivamente. Fue rudeza innecesaria, fue un semestre pésimamente planeado por los responsables de proyectar y se lastimó mucho a una afición que si algo hace es apoyar. Me puede acusar de quedarme atrapado en el pasado y quizá tenga razón pero discúlpeme, me da coraje.
Hoy la apuesta Almada da frescura pero más frescura dan los buenos resultados. Este equipo con la voluntad que pone en la cancha y con salud (no hay banca para suplir estrellas) puede llegar lejos y ganarle a cualquiera en una hipotética liguilla, ¿qué significa eso? Usted dígame. Mi coraje que ya se me pasará es porque a este equipo si se le respeta su ADN nadie lo puede enfrentar como víctima. Así pasó en el pasado reciente, ojalá no vuelva a suceder.
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