Continuación…
Esta situación puede crear un grave conflicto en las relaciones matrimoniales pues si una pareja tiene dificultades, en el aspecto sexual, los demás niveles se verán afectados.
El esposo en su trabajo no podrá desarrollar totalmente toda su capacidad, ella andará siempre tensa, molesta y pronto empezaran los gritos, los insultos, los desacuerdos por verdaderas tonterías.
Desgraciadamente no hemos sido educados para dar placer sexual a nuestra pareja, porque no nos han enseñado a sentir placer sexual nosotros mismos. Porque siempre nos han dicho que eso es pecado, que es sucio, que es cosa del demonio.
Una joven y guapa señora, me confesaba que ella no comprendía que le pasaba a su esposo, un hombre bastante atractivo y joven, pues él se acostaba, tomaba una revista o el periódico y empezaba a hojearlo, ella se paseaba por la recamara con un sugestivo baby doll, o completamente sin ropa y éste ni siquiera volteaba a verla.
Cuando las cosas llegaron al clímax de la desesperación, pidieron ayuda. Después de mucho buscar, pues siempre que se trata de situaciones íntimas, como que nos resistimos a confiarlas o a sacarlas al consciente, entonces llegamos a la raíz del problema: Cuando este hombre, era aún un niño de seis o siete años, andaba jugando con otros amiguitos del barrio, cuando a uno de los mayorcitos se le ocurrió una idea; -vamos al arroyo a masturbarnos- invito a todos los demás niños.
Nuestro héroe, por no aparecer como un cobarde, también aceptó la invitación y junto con los demás niños, se fue al arroyo. Cuando estaban realizando aquel acto, pasó una de las señoras del pueblo y al verlos y gritarles con voz estentórea: “Van a ver con sus papás, muchachos cochinos”. El niño se asustó de su acción.
La famosa señora fue con el chisme con el padre de aquel pequeño, de tal manera, que cuando éste llegó a su casa aún asustado, el padre lo recibió con el cinto en la mano, dándole de cintarazos, lo llevó hasta la imagen de un Santo Niño de Atocha que tenía en su recamara y gritándole le dijo: “Hínquese ante el Santo Niño, pídale perdón y júrele que ¡nunca más va a volver a hacer cochinadas!”.
Aquí quedo marcada la vida sexual de este joven, pues aun cuando él quería estar con su mujer, la orden en el subconsciente era más fuerte que él. – ¡No volverás a hacer cochinadas!- porque para este hombre, tener relaciones sexuales, era hacer cochinadas.
Una señora me platicaba que cuando su novio le dio un beso en la boca, ella llegó temblando a su casa, porque pensaba que ya no era señorita; y así les podría contar infinidad de casos que me ha tocado ver, acerca del problema que presenta para muchas personas el aspecto sexual.
Pero hay otra clase de “Pecados” que tampoco nos dejan disfrutar la vida. Hay personas que no pueden tomar una copa porque es pecado... no se pueden maquillar, porque es pecado… no pueden comer carne los viernes, porque es pecado… no pueden escuchar una conferencia si no es en la Iglesia, porque es pecado… no pueden ir a un baile, porque es pecado… no pueden leer otro libro que no sea la Biblia, porque es pecado… no se pueden hacer una transfusión de sangre, aun cuando sea vital para la salud, porque es pecado… no pueden dejar de asistir a la Iglesia los domingos porque es pecado…
En fin, tantas y tantas limitaciones que nos han puesto, desde el momento en que fuimos concebidos, que ahora, no nos explicamos porque, pero no podemos gozar esta vida y solo estamos esperando morir para “pasar a mejor vida”.
La realidad es que nadie ha regresado para decirnos si efectivamente en el “otro mundo” hay una manera diferente. Ahora, en este momento, ya podemos vivir “otra vida”, una vida llena de amor, de abundancia, de satisfacciones, una vida que valga la pena vivir.
Muchas veces sucede que a la mujer la condicionan solo para el sufrimiento, pues es común oír a los mayores decir: -La mujer solo sirve para sufrir-, -pobrecita, solo Dios sabe que destino le espera-, -los hombres son malos-, -quien bien te quiere, te hará sufrir-.
Y cuantas situaciones más nos han puesto como meta para vivir la vida. Así que cambie su punto de vista, vea las cosas desde otro ángulo, hay que buscar primero nuestra propia felicidad, pues recuerde que “nadie puede dar lo que no tiene”, pues hay que vivir la vida momento a momento, no se preocupe por lo que pasó ayer, solo vea cuales fueron las razones que lo impulsaron a actuar de esa manera, perdone esa situación y prepare su mente para vivir este día como si fuera hoy el último de su existencia.
Algunas mujeres que por diversas razones (venganza, coraje, debilidad, etc.) engañan a sus maridos, quedan tan arrepentidas, con un gran sentimiento de culpa, que de ahí en adelante ya no pueden volver a ser felices, ni a disfrutar ningún momento de su vida, pues solo están recordándolo, con tal amargura, aquel desdichado momento en que (según ellas) cometieron aquel “pecado”.
El ser humano en su gran complejidad vive cosas increíbles. Recuerdo el caso de un señor que me comentaba la infidelidad de su mujer: “Al llegar a su casa cuando no lo esperaban, encontró a su mujer in fraganti, tenía un arma al alcance, pero en esos momentos hay un destello de cordura y no cometió aquel asesinato para lavar su honra, que le vino momentáneamente a su mente. Le pidió a aquel hombre que se marchara inmediatamente, pero antes le preguntó qué cuanto hubiera pagado por los servicios recibidos, aquel hombre le contesto y le exigió que dejara la paga”. Continuará…
Dios te bendice y te acoge!!!
Despertar…es.
“La esperanza es algo bueno, tal vez lo mejor. Y lo bueno nunca muere. Estaré deseando que estas palabras te encuentren, y te encuentren bien”. A la luz de nuestras familias, decía Jesús, “No me digas que me amas, dime como vives”. “La familia que ora unida, permanece unida”. INICIATIVA LAGUNA un proyecto de valor y de valores para los laguneros y el MUNDO!!! Estoy a sus órdenes en la dirección electrónica: www.facebook.com/iniciativalaguna.comarcalagunera/ A través de Twitter: @Germandelacruzc Lo invito a visitar mi blog con más de 490 artículos de su interés: www.familia.blogsiglo.com
“QUIEN NO VIVE PARA SERVIR, NO SIRVE PARA VIVIR”
Germán de la Cruz Carrizales
TORREON, COAH. MÉXICO
MMXIX