PARA EMPEZAR
SE ACABÓ
Lamento informarles a los fans de Azteca Deportes que sus transmisiones de futbol y más si son de partidos grandes o de selección son hoy en día una verdadera porquería. Deben aceptar los fans de Martinoli y García que sus mejores tiempos ya pasaron. No defiendan lo indefendible.
Lo triste de esto es que no pasa por la calidad de Luis García o de Christian Martinoli, los dos son unos fenómenos, una pareja que tiene su lugar indiscutible en la historia. Luis García fue un gran jugador y después del retiro entendió como nadie la complicada labor de seguir vigente, su claridad para ver el futbol y su pluma para escribir columnas son de excelencia. Por su parte, Christian Martinoli es el mejor narrador de nuestro país y no le pide nada a ninguno de habla hispana, tiene gracia y sabe de futbol un trasatlántico, también tiene una excelente pluma, calidad de sobra pues.
La pareja de Martinoli y el Doctor tumbó el imperio lleno de mamarrachadas que Javier Alarcón había parado en Televisa, combinaron el futbol con el show de manera magistral, provocando que Televisa tomara vuelo como mar que se aleja presagiando un tsunami.
El tsunami ya llegó y la competencia ha vuelto a ser pareja entre el duopolio, como políticos mexicanos, tanto Aztecos como Televisos se declaran siempre vencedores en el rating cuando juega la selección o cuando comparten la transmisión de la final de la Liga MX.
TV Azteca ha apostado a la cochinada para mantener esos ratings, sus transmisiones huelen más a La Academia que a futbol, el partido dejó de importarles, contaminan la pantalla con anuncios y con supuestas interacciones con el público todo el tiempo, ya todo es broma, ya vale todo, la kiss cam, menciones hasta de ferreteras de esquina, los pies de Campos en la cara de Martinoli, Zague siendo Zague, Chacón da pena ajena, interrupciones, "tecnología", pantalla reducida para anunciar la pelea que sigue, en fin, una porquería que le falta al respeto al televidente que les tiene un amor ciego por lo que fueron.
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