¿Otro 2015?

PARA EMPEZAR

¿OTRO 2015?

Enero de 2015, Santos Laguna iniciaba un torneo más al mando del portugués Pedro Caixinha. Polémicas llegadas y salidas de jugadores y cómo no, salían dos símbolos del éxito santista: un tal Oswaldo Sánchez y un tal Juan Pablo Rodríguez, uff. La afición angustiada sintió que las llaves del club se le habían entregado al ex Forçado, se le acusaba de dar el visto bueno y facilitar la salida de ídolos y pesos pesados como Oribe Peralta, Darwin Quintero, Felipe Baloy, Guty Estrada mas los arriba citados, no era poca cosa. Aficionados incluso usaron playeras con mensajes: “Caixinha! El titulo o te vas!”, solo ganar aquel Clausura 2015 le valía al portugués.

La renovación de plantel que le tocó a Caixinha fue una realidad, se renovó la defensa, llegó Marchesín y el Pulpo, Cali Izquierdoz ya comandaba y Abella con Aldrete jugaron las laterales ese torneo. Santos Laguna dejó de tener un plantel grueso, volteabas a la banca y ya no estaban más los Lugo, Crosas, Hércules o Aarón Galindo que tanto ayudaron para ganar partidos.

La historia usted ya la conoce. Santos fue campeón colándose de último momento a la liguilla y jugándola de manera perfecta. En el último tramo Caixinha encontró a Néstor Araujo y lo puso por Alanís. También le terminó por dar toda la confianza a Javier Orozco como 9 y cumplió confiando siempre en el Avión Calderón que en la liguilla pagó con creces la confianza de su técnico. Las críticas se volvieron halagos, el panorama tétrico se volteó a fiesta, nadie lo podía creer. Santos calló bocas como nunca. Hay “analistas” que aún no se recuperan de ese ridículo y le siguen llamando “chiripada”.

Condiciones muy distintas pero el Santos de Almada despertó, suma triunfos y solidez atrás, Furch se reencontró con el gol y Gael Sandoval ha dado ese toque de creatividad que urgía. Lo más importante es que contra Puebla, el equipo albiverde no bajó el ritmo, cosa que estaba pasando prácticamente en todos sus partidos. Falta mucho pero lo innegable es que este Santos resurge, se negó rotundamente a tener un papelón de torneo. ¿Hasta dónde llegará? ¿Nos volverán a callar la boca a todos?

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