Tras recibir el alta, la infanta Cristina, quien vestía pantalón de color beige y chaqueta azul claro, se despidió del personal de la clínica, que poco antes habían abandonado la Reina Sofía y su hermana Irene de Grecia.Los Duques de Palma destacaron que el nacimiento de su hija ha supuesto "una alegría", pero "nos daba igual que fuera niño o niña".Unas 250 personas esperaban en los jardines de la clínica la salida de la Infanta y de su hija, a quienes recibieron con aplausos, vítores y muestras de afecto, con gritos como "felicidades por la niña" o "enhorabuena Cristina"."Habrá que esperar más tiempo" para observar la reacción de los demás pequeños, apuntó la infanta aunque en estos primeros días los niños "han hecho muchos dibujos para regalar a su hermana" dijo.Tras aparecer inicialmente los padres con la niña, luego se incorporaron sus otros tres hijos, que vestían pantalón blanco y polo y zapatos rojos.Preguntados los padres si la familia puede aumentar, contestaron que "por ahora no habrá más niños" y anunciaron que el bautizo de Irene será antes del verano, aunque no pudieron precisar la fecha porque "hay que compaginar muchas agendas".La niña, de pelo muy rubio, se parece a su hermano Pablo, según sus padres, pero también tiene rasgos similares a sus otros dos hermanos.Irene Urdangarín, en brazos de su madre, vestía un faldón de piqué blanco con unos bodoques rosas en los bajos y un jersey también blanco de algodón, y en los más de diez minutos que duró la presentación permaneció casi todo el tiempo dormida, excepto en un momento en que abrió los ojos.Iñaki Urdangarín también tomó a su hija en brazos y, entonces, la Infanta Cristina bromeó: "esta es la foto".Miguel, el más pequeño de los hijos, se acercó a su hermana y le acarició el rostro, mientras Pablo asintió con la cabeza cuando le preguntaron si estaba contento.Muy sonrientes, la infanta Cristina y su esposo mostraron por primera vez a su hija a la prensa y comentaron que Irene "se porta bien y come bien".La nueva “royal” nació en la clínica Teknon, en Barcelona, y es la sexta nieta de los Reyes de España Juan Carlos y Sofía.El saber el sexo del bebé fue una sorpresa para ellos, pues a la infanta Cristina y a su esposo Iñaki de Urdangarín no les gusta averiguarlo de antemano.La pequeña, llega después de tres varones: Juan Valentín, Pablo Nicolas y Miguel, un deseo familiar de la pareja cumplido, pues ansiaban una niña.Tras el nacimiento de su pequeña hija Irene, los Duques de Palma no caben de orgullo, y lo aseguran, mostrando al mundo a su hija.