En todos estos años, la soberana ha recibido en audiencia a diez primeros ministros, desde el conservador Winston Churchill hasta el actual jefe de Gobierno, el laborista Tony Blair, el único mandatario que nació en su reinado (mayo de 1953).A lo largo de su vida, Isabel II fue testigo de los festejos callejeros por el final de la Segunda Guerra Mundial (1939-45), la "guerra fría", la llegada del hombre a la Luna, el éxito de Elvis Presley, la "beatlemanía" de los años sesenta, el desarrollo de internet y los escándalos de su familia.El Gobierno le regaló un juego de té del famoso taller de cerámica Spode, del condado de Staffordshire, al noroeste de Inglaterra, que al parecer costó unos mil 400 euros.Frente al Registro Civil de Windsor, donde se casó el príncipe de Gales, unos escolares colgaron una gran pancarta de colorines con el "Feliz Cumpleaños", mientras que otros niños le regalaron una tarjeta gigante con el dibujo de una tarta de tres pisos.Niños de escuelas locales, que portaban banderas inglesas, fueron los primeros en saludar a la Reina, que llevaba un abrigo rojo y una pamela a tono, que acompañó con un collar de perlasPara su cumpleaños, la Reina ha recibido más de 20 mil tarjetas por correo postal y 17 mil mensajes por el electrónico, según detalles facilitados por el palacio de Buckingham, residencia oficial de la Familia Real británica.Por ser un cumpleaños especial, la guardia del castillo colocó en su torre un estandarte real gigante, sólo utilizado para determinados eventos, como la boda del príncipe Carlos.Pese a su avanzada edad, Isabel II no mostró signos de cansancio durante el recorrido de más de cuarenta minutos por las calles de Windsor, un pueblo que fue testigo hace un año de la boda del heredero de la Corona y Camilla, duquesa de Cornualles.Los Guardias Irlandeses acompañaron la caminata con música de los años cincuenta del siglo pasado.Acompañada por su esposo, el duque de Edimburgo, la Reina escuchó el feliz cumpleaños que tocó una banda de la Guardia Irlandesa frente al edificio real, la residencia favorita de Isabel II.La soberana salió por la puerta Enrique VIII del castillo para saludar a miles de súbditos que, con banderas inglesas y diversas pancartas, se dieron cita en Windsor.La reina Isabel II de Inglaterra celebró su ochenta cumpleaños entre una multitud congregada ante la gran fortaleza del castillo de Windsor, al oeste de la capital británica, donde recibió cantidad de flores y tarjetas.