En el último fin de semana previo a la celebración de la Navidad, cientos de laguneros abarrotaron el Centro Histórico de Torreón para realizar sus compras navideñas exponiéndose a un alto riesgo de contagio de COVID-19 debido a las aglomeraciones que se generaron principalmente en las avenidas Juárez e Hidalgo. Los establecimientos no se dieron abasto ante el ingreso de numerosos clientes a los comercios y solo se limitaron a tomarles la temperatura; a las afueras de una farmacia una banda de cumbia amenizó el recorrido a pocos centímetros de distancia de los transeúntes que pasaron por la avenida. Aunque la mayoría de los ciudadanos sí portaron el cubrebocas, también se pudo observar a personas que no lo llevaban. De igual manera se observaron a familias completas, con niños pequeños, recorriendo las calles, en un claro relajamiento de las medidas sanitarias contra el COVID-19.