Una enorme fotografía de Gabo, como lo llamaban de cariño, fue colocada en el lugar y fue objeto de homenaje con las emblemáticas flores amarillas.Con las flores favoritas de Gabriel García Márquez (1927-2014), rosas amarillas, el pueblo mexicano ha llegado al Palacio de Bellas Artes para despedir al connotado escritor colombiano, al que acogió como uno de los suyos y quien a través de sus obras los hizo vibrar con su realismo mágico.
Autor: EFE Y NOTIMEX, publicada el 21 de abril de 2014