La vista desde la carretera que bordea los cerros ofrece un campo tapizado de color naranja
La vista desde la carretera que bordea los cerros ofrece un campo tapizado de color naranja. Es el ejido Monterrey, a media hora de la cabecera municipal de Lerdo, Durango. La vista desde la carretera que bordea los cerros ofrece un campo tapizado de color naranja. A mediodía, los rayos inclementes del sol desafían a un otoño que parece verano. El acceso a los campos de cempasúchil se da tras cruzar las vías del ferrocarril, justo después de pasar una pequeña plaza en el pueblo.
Autor: VERÓNICA RIVERA , publicada el 28 de octubre de 2020