Al comenzar el partido cayó un torrencial aguacero que dejó resbalosa la grama del Estadio Corona, el cual afectó considerablemente a los dos equipos en el manejo del esférico, así como en las imprecisiones, sobre todo a la hora de realizar la recepción.
Al comenzar el partido cayó un torrencial aguacero que dejó resbalosa la grama del Estadio Corona, el cual afectó considerablemente a los dos equipos en el manejo del esférico, así como en las imprecisiones, sobre todo a la hora de realizar la recepción.Fotos:El Siglo de Torreón 15 de noviembre 2004.
publicada el 15 de noviembre de 2004