Los seis músicos de su orquesta y los 14 elementos del mariachi que estaban sentados a la orilla del ruedo, lo veían de reojo a la vez que seguían las notas de sus partituras. Mientras tanto “El Potrillo” caminaba, enviaba besos a diestra y siniestra y sonreía coquetamente a las enardecidas fans.
Los seis músicos de su orquesta y los 14 elementos del mariachi que estaban sentados a la orilla del ruedo, lo veían de reojo a la vez que seguían las notas de sus partituras. Mientras tanto “El Potrillo” caminaba, enviaba besos a diestra y siniestra y sonreía coquetamente a las enardecidas fans.Fotos: El Siglo de Torreón 18 de julio 2005.
publicada el 18 de julio de 2005