Los puntas Franco y Borgetti casi no entraban en juego debido a que Irán había partido en dos al conjunto mexicano, como si le hubiera quitado una pieza de su engranaje en el medio. Bravo, asistido a sus espaldas por Méndez, se diluía con facilidad y Pavel Pardo no daba abasto en su afán de abrir huecos.
Los puntas Franco y Borgetti casi no entraban en juego debido a que Irán había partido en dos al conjunto mexicano, como si le hubiera quitado una pieza de su engranaje en el medio. Bravo, asistido a sus espaldas por Méndez, se diluía con facilidad y Pavel Pardo no daba abasto en su afán de abrir huecos.Foto: EFE, AP 11 de junio de 2006
publicada el 11 de junio de 2006