La espera para los fans había sido mucha, Miguel se había presentado en una sola ocasión en Torreón, allá por 1989 en el estadio Revolución cuando aún se hacía acompañar por su banda Zas. El romanticismo llegó con Hagamos el Amor donde el cantante dejó su guitarra a un lado para tocar los teclados.
La espera para los fans había sido mucha, Miguel se había presentado en una sola ocasión en Torreón, allá por 1989 en el estadio Revolución cuando aún se hacía acompañar por su banda Zas.
El romanticismo llegó con Hagamos el Amor donde el cantante dejó su guitarra a un lado para tocar los teclados.El roquero argentino Miguel Mateos ofreció la noche del sábado un repaso musical en el que se demostró que a pesar de vivir tiempos devaluados, su música continúa perenne en el inconsciente colectivo de sus fans
17/03/2003
Foto: Julio Hernández
publicada el 17 de marzo de 2003