El delantero expresó que su determinación es jugar el sábado y que el domingo sea la cirugía 'para no perderme el partido' ante Monterrey. (Archivo)
El momento que vive Chivas del Guadalajara exige al máximo a sus integrantes. Por eso, el regiomontano Aldo de Nigris ha decidido que se operará hasta el próximo domingo el dedo anular derecho, que se lastimó durante el entrenamiento del pasado miércoles y de esta manera podrá jugar el sábado cuando el cuadro rojiblanco visite al Monterrey.
Para el delantero, significa, además, el regreso a casa. No sólo es su ciudad natal, sino que se meterá al estadio Tecnológico, donde vivió días de gloria con los Rayados. Es tanto el cariño por ese club, que tampoco descarta la posibilidad de algún día volver a ponerse esa camiseta, para poner fin a su carrera futbolística.
“Sí, ojalá algún día (pueda) volver, fue un cariño muy fuerte, un equipo, una institución que siempre voy a llevar en mi corazón por lo que se vivió y ojala algún día pueda volver, no descarto esa posibilidad”, admite con sinceridad, tras concluir la práctica de este jueves en las instalaciones de Verde Valle.
Aldo lleva vendada la mano derecha. Ha entrenado con protección suficiente para que el dedo anular no sufra más daño. La lesión requerirá de una intervención quirúrgica, pero no le impedirá estar en el terreno de juego, pues con una protección será suficiente para evitar que se lastime más.
“Fue una jugada ahí accidental y se da esto que se tiene que llegar una cirugía. Obviamente no es agradable, pero bueno, no me afecta tampoco en mi rendimiento para nada, simplemente que es peligroso porque puedes perder la movilidad por completo. Mi decisión es jugar el sábado y el domingo que sea la cirugía para no perder tanto tiempo también, no perderme partidos y menos un partido tan importante como este”, detalla.
Y es que el regiomontano no quería perderse el regreso al hogar. Por eso, durante una reunión con el doctor Rafael Ortega y el técnico Carlos Bustos, ha decidido jugar el sábado. “Sí, nada más una férula para proteger y nada más. No es nada del otro mundo, estoy tranquilo y con muchas ganas de poder ser tomado en cuenta para este partido”, añade.
“Es algo bonito volver a casa y volver a ver a las amistades que uno deja, eso es lo más bonito y después un estadio que me dio tantas alegrías, un estadio que me sienta muy bien en ese aspecto, con una afición también que le tengo un cariño enorme”, señala el atacante del Rebaño Sagrado, quien jugará por primera vez como rojiblanco en el estadio Tecnológico, pues la ocasión anterior en que Chivas jugó ahí, estaba concentrado con la Selección Mexicana.
“Sí, fue el repechaje (ante Nueva Zelanda, rumbo al Mundial) y no pude ir. Ahora está la oportunidad y más que nada decidí jugar por el parámetro que es Monterrey, porque va a ser un partido fuerte y nos vamos a dar cuenta en qué nivel estamos. No me lo quiero perder por eso y por las otras razones, el entorno y lo que representa para mí volver a mi ciudad, ante un equipo que siempre voy a llevar en mi corazón. Eso es algo que siempre será bonito, las amistades más que nada, volver a ver a grandes amigos y grandes seres humanos que vivimos una etapa muy buena”, relata De Nigris.
Aunque la posibilidad de algún día volver a Monterrey para retirarse le seduce, hoy se debe al Guadalajara y quiere una victoria el próximo sábado. “Cuando se dio la lesión (en la mano derecha) dije ‘a lo mejor es el destino que no debo ir a jugar allá’, pero gracias a Dios me permite jugar perfectamente, al 100 por ciento. Quiero jugar porque Rayados es un equipo que está muy bien, que sé que va a pelear el campeonato y el parámetro es bueno para nosotros, ahí darnos cuenta de cómo estamos. No me lo quisiera perder por eso y también por las otras circunstancias, lo que representa para mí volver a casa y qué mejor que con un triunfo”, concluye el atacante del Rebaño Sagrado.