En la primera imagen de 1947, el reloj descubierto con una carátula; en la segunda con tres carátulas y cubierto.
Los Minaretes son construcciones arquitectónicas conocidas por los pueblos de la vieja Persia, Siria e Irán desde el año de 1089, llamados por ellos como grandes torres de fuego; utilizados para llamar a los fieles por once veces al día para realizar sus rezos. En nuestro país, propiamente en la Villa Lerdo de Tejada en el año de l889, los cultos ciudadanos en una torre instalaron la maquinaria de un Reloj, para que marcara las horas, minutos y segundos del tiempo, como testigo de los hechos del pasado y del presente. Está joya arquitectónica para los lerdenses se convirtió en un símbolo de identidad que ha trascendido en nuestro región, así como internacionalmente, formando parte de aquel desarrollo arquitectónico de la otrora Villa Lerdo de Tejada y después de la bella y antigua Ciudad Lerdo.
Fue en el período de 1882-1891, administración que gobernó el coronel Rafael González del Castillo como jefe político del partido de Mapimí, un buen servidor que durante sus nueve años de servicio llevó a la Villa de Lerdo a un progreso sustentable. Concertó dentro de sus actividades la venta de grano entre la comunidad obteniéndose importantes ganancias. Como buen gestor convocó al pueblo proponiéndole en que se invertirían las utilidades por el negocio del grano; por lo que la comunidad en forma democrática y creativa, estuvo de acuerdo en que fuera una obra de beneficio, siendo así que la mayoría aprobaría la construcción de un Reloj Público. Para darle seguimiento al mandato del pueblo en el año de 1889 contrató los servicios del arquitecto Miguel Trad Jacob, un profesionista reconocido y oriundo de la población Deir El Qamar, que en lengua árabe significa "Monasterio de la Luna", población localizada en el centro sur de Líbano. Don Miguel venía procedente de Durango, y había llegado a la Villa de Lerdo, para intervenir en la conclusión de la Iglesia del Sagrado Corazón de la Ciudad Jardín, donde supervisó los trabajos de albañilería del maestro Tiburcio López.
El libanés se encargó de elaborar unos diseños de torres para instalar un Reloj Público mostrándole los planos al Coronel González Castillo, además el diseño de una torre que había edificado en 1877 en el puerto de Haifa, Palestina, con características propias de los mahometanos la que luce en un esbelto minarete que tal vez sirvió de inspiración a Miguel Trad, para planificar la torre del reloj de Lerdo. Es así, que el funcionario y el profesionista cerraron el contrato comprometiéndose el constructor entregar la obra terminada para el l5 de Septiembre de 1889. En dicho contrato se especifica: que la torre constó de tres cuerpos; "Cenotafio, Cuerpo Inferior y Cuerpo Superior", los cuales se dividieron con los barandales de cantera y la parte alta de la torre se destinó para el reloj. Para iniciar los trabajos se mandó demoler los muros de la esquina sur-poniente de las llamadas casas consistoriales, nombre que les aplicó en el año de 1866 Don Catarino Navarro Urías, legendario Jefe Político de la Villa Lerdo de Tejada.
En una ceremonia solemne celebrada el 5 de Mayo de 1889 aprovechando el acto para festejar la Batalla de Puebla, se colocó la primera piedra a cargo del Coronel Rafael González del Castillo, siendo por la tarde de ese día en un evento cívico muy emotivo se ejecutó un programa muy ordenado. Como primer número fue la apertura de la Orquesta del Sr. Don Ponciano Campos, luego la lectura del parte oficial sobre la Batalla de Puebla, bendición de la primera piedra, colocación de la gaveta conteniendo los siguientes objetos: copia del contrato de construcción, cinco monedas de oro denominadas "onzas" del año 1889, ejemplares del periódico "La Brocha", continuando el programa con otros puntos importantes. En dicho acto estuvieron presentes las autoridades: C. Coronel Don Rafael González del Castillo, Sr. Ing. Miguel Trab Jacob, el Sr. Cura Don Celedonio Valenzuela, la Sra. Doña Carlota Gutiérrez de Hernández, esposa del Sr. Ángel Hernández Luengas y Srita. Blanca Moreno en su carácter de madrinas, además el Sr. Don Enrique H. Sterling. y público en general.
Para el día 1o. de Septiembre la obra de la torre estaba totalmente terminada, contemplándose en forma relevante por los cuatro costados del Minarete grabadas en las piedras de cantera la inolvidable frase en idioma árabe; "La ELIH ILA ALAH", que en español se refiere "NADA MÁS ALTO QUE ALÁ" y en la parte superior hacia el oriente se observaba su bella con un arco de herradura con estilo musulmán. La instalación del Reloj, estuvo a cargo de Henry Stierlin Laux, conocido en Lerdo como Enrique Sterling, quien nació en Mountain Vieuw, California, Estados Unidos de América, en 1857. Fue hijo de los inmigrantes europeos Conrado Stierlin (suizo) y Clara Lux (alemana), posteriormente pasó a la Ciudad de México. Finalmente se instaló en Lerdo, donde estableció su joyería y relojería a la que llamó "La Suiza", localizada en la 5ª de Hidalgo número 120 de acuerdo con la antigua nomenclatura y daba esquina con la actual avenida Matamoros; Sterling fue un hombre de negocios, poseía una optometría, representante y vendedor de los afamados pianos Steinway, entre otros oficios.
Por instrucciones de las autoridades ordenó la compra del reloj en Berna, Suiza, habiendo sufragado los gastos las arcas de la Villa de Lerdo. El centenario aparato relojero y su maquinaria todavía opera en la actualidad, mismo que fue transportado por barco sobre el Océano Atlántico y llegó al puerto de Veracruz, luego lo trasladaron por vía férrea a Lerdo, arribó empacado en varias cajas que fueron abiertas por Sterling. Al iniciar su actividad el relojero americano, desempacó las partes del mencionado reloj y notó inmediatamente que solamente había venido una carátula, por lo que procedió a su instalación en el lado oriente dejando pendiente el orificio al poniente y cubriéndolo por lo pronto con madera. El costo de la obra de construcción de la torre fue de $ 350.00, valor del Reloj con dos carátulas. 80.00, valor del pararrayos c/3 puntas de platino, 70.00, total de 500.00. La altura de la torre morisca y el reloj es de 10.25 metros.
Una vez terminada la construcción arquitectónica del reloj más famoso de la Comarca Lagunera, con su bello estilo morisco; pueblo y gobierno de aquella época de ensueño, dispusieron para la inauguración de esta magna obra el día l5 de Septiembre de l889 a la ll.00 de la noche y esperaron las once campanadas aprovechando en que se vitorea a los héroes de nuestra Independencia. Todo estaba preparado para el grito inclusive, cuando inesperadamente cayó una fuerte tormenta registrada en esa fecha que impidió la celebración de este acto. Por lo que por ese motivo la culta ciudadanía de aquel entonces transfirieron hasta el día 16 de Septiembre de ese año para que se continuara el acto de inauguración del Reloj. Iniciándose la ceremonia a las 11.00 horas de la fresca y gloriosa mañana, disponiéndose a que fuera más solemne la fiesta, se ejecutaron 21 cañonazos del Cañón de Montaña que existía en la Jefatura a cargo del Sargento Manuel Solorio.
Con el pasar del tiempo a la torre morisca se le han realizado varias modificaciones por algunas autoridades o a través de patronatos, como la ejecutada el 11 de Mayo de l947, consistiendo en la remodelación del cuerpo superior donde se encuentra la maquinaria del reloj y cubierta, y se le agregaron dos carátulas al lado poniente y al sur. Posteriormente en el año de 1987 a los barandales de cantera que dividen los cuerpos, se recuperaron varias piezas, en virtud de encontrarse deterioradas por la erosión y los excrementos de las palomas.
LERDENSE
