La lista es encabezada por Chihuahua, gobernado por el priista César Duarte, con obligaciones financieras por 41 mil 309 millones de pesos. (ARCHIVO)
Cuatro priistas encabezan la lista de gobernadores que heredarán finanzas ahorcadas a sus sucesores.
La deuda pública que dejarán es mayor al monto que reciben sus estados en un año de participaciones federales, es decir, recursos que usan para gasto corriente, entre ellos el de pago de créditos contratados.
En total, los 12 mandatarios que dejarán su cargo este año legarán a quienes los sustituyan adeudos por más de 167 mil millones de pesos.
De acuerdo con un informe del Senado, el saldo representa el 32.4 por ciento del total de la deuda de las entidades federativas, que rebasa ya los 515 mil millones de pesos.
En el caso de cuatro estados, los candidatos que logren el triunfo en las elecciones de 2016 recibirán administraciones con deudas que rondan y hasta rebasan el equivalente al 100 por ciento de las participaciones federales que se entregan a las entidades.
La lista es encabezada por Chihuahua, gobernado por el priista César Duarte, con obligaciones financieras por 41 mil 309 millones de pesos, lo que representa el 236.3 por ciento de sus participaciones.
El segundo lugar es ocupado por Veracruz, cuyo mandatario, Javier Duarte, heredará una deuda de 41 mil 286.8 millones de pesos, es decir, el equivalente al 115.7 por ciento de sus participaciones.
El Gobierno saliente de Roberto Borge, en Quintana Roo, dejará sus arcas con cuentas por pagar superiores a los 21 mil 983 millones de pesos, mismos que equivalen al 238.8 por ciento de los fondos que ingresan al estado por participaciones.
En el caso de Zacatecas, los créditos por 7 mil 631 millones de pesos que dejará Miguel Alonso Reyes, representan el 95.5 por ciento de los recursos que inyecta la Federación.
En Tamaulipas, gobernado también por el priista Egidio Torre Cantú, quien resulte ganador en la elección podría recibir un Gobierno con 12 mil 980 millones de pesos en deudas, aunque representa un porcentaje menor de participaciones federales que los cuatro antes mencionados.
Mientras que en Oaxaca -cuyo gobernador, Gabino Cué, fue postulado por el PRD, el PAN y Convergencia--, el saldo por pagar es de 11 mil 284 millones.
Y en Puebla, el panista Rafael Moreno Valle heredará 8 mil 607 millones de pesos de débito.