A Lucy a veces le llega la idea de que ya no sabrá nunca más el paradero de su hijo, pero luego renueva sus esperanzas de saber algo de él y así se pasa la vida.
Ya son poco más de cinco años de angustia y desesperación por conocer qué le sucedió a su hijo, quien desapareció el 21 de marzo de 2011 y todavía no sabe nada de su paradero... si está vivo o muerto.
Lucy Flores Peña cuenta que su hijo, Julio Alberto Villagrana Flores, era elemento activo de la Policía Municipal de Torreón y desapareció el 21 de marzo de aquel año, cuando tenía 23 años.
"Mi hijo se encontraba trabajando y ya no supimos de él. Un compañero de mi hijo, que se llamaba José Pizaña, nos habló por teléfono y dijo que preguntáramos por qué lo tenían arrestado", dice Lucy.
El 22 de marzo de ese año, un hermano de Lucy fue a las instalaciones de la Policía Municipal a preguntar por Julio Alberto y le dijeron que estaba arrestado por tres días.
Tras cumplirse ese tiempo, Lucy fue de nueva cuenta a las instalaciones de la corporación y le dijeron que su hijo no había vuelto a trabajar y que nunca estuvo arrestado, lo que sorprendió a todos. Los familiares de Julio Alberto acudieron a todos los lugares donde creían que podrían encontrarlo, pero no supieron nada y un mes después de la desaparición del muchacho, su amigo, José Pizaña, fue encontrado muerto en Gómez Palacio con el tiro de gracia, junto a otros dos jóvenes.
Hace tiempo, Lucy se incorporó al grupo VIDA para continuar con la búsqueda de su hijo, e incluso participó en varios recorridos en la Región Lagunera, pero luego desistió porque se sentía deprimida al encontrar osamentas y pedazos de ropa, partes de vehículos, casquillos, entre otras cosas.
Hace unos meses falleció la mamá de Lucy, lo que la tiene aún más deprimida, pero no ha muerto la esperanza de encontrar a su hijo o, cuando menos, saber qué le hicieron y si lo mataron, dónde quedaron sus restos para darles cristiana sepultura.
Desesperanza
A Lucy a veces le llega la idea de que ya no sabrá nunca más el paradero de su hijo, pero luego renueva sus esperanzas de saber algo de él y así se pasa la vida.
