Víctima. Javier Valdez era un periodista especializado en el tema de narcotráfico. Fue asesinado ayer lunes a balazos en Culiacán. (ARCHIVO)
El periodista y escritor Javier Valdez fue asesinado ayer en Culiacán, Sinaloa, después de haber salido de las oficinas del semanario Ríodoce.
De acuerdo con el reporte oficial, fue atacado al mediodía por un grupo armado en la colonia Jorge Almada, donde le dispararon en 12 ocasiones y lo dejaron tendido en el piso. Valdez fue un periodista especializado en temas de crimen organizado y corrupción en las instituciones de Seguridad Pública y de Procuración de Justicia.
Fue director del semanario Ríodoce, que cofundó hace 14 años, corresponsal del diario La Jornada y autor de ocho libros sobre temas relacionados con el crimen organizado, siendo "Narcoperiodismo" su última obra.
"El narcotráfico está porque no hay Gobierno", dijo en octubre pasado, a propósito de este libro, "el principal problema que tenemos para el ejercicio periodístico es la autoridad". "Si el narco tiene este poderío, es porque el Gobierno lo ha permitido, o porque está sometido, porque no está o porque es cómplice".
El Comité para la Protección de Periodistas calificó el homicidio de Valdez como un golpe al periodismo y exigió a las autoridades investigar el caso.
"Su muerte es un golpe al periodismo mexicano y al público mexicano que ven una sombra de silencio esparcirse por el país", dijo Joel Simon, director ejecutivo del CPJ. Valdez es el sexto periodista ejecutado en lo que va del año, según varios reportes nacionales, lo que coloca a México como uno de los países más riesgosos para esta profesión.
El pasado 2 de marzo fue ejecutado Cecilio Pineda Brito, periodista independiente en Guerrero y colaborador de La Jornada, y el 19 del mismo mes, en Veracruz, le quitaron la vida al columnista Ricardo Monlui, director del diario El Político y columnista de temas de la industria cañera en el Diario de Xalapa.
Cuatro días después, el 23 de marzo, mataron a Miroslava Breach, reportera del periódico La Jornada en la capital de Chihuahua. El 14 de abril fue asesinado en La Paz, Baja California Sur, Maximino Rodríguez, y el 2 de mayo Filiberto Álvarez, reportero de una radio de Morelos.