El escolta JJ Redick (17) encestó 28 puntos en la victoria de los 76’ers 121-113 sobre los Hawks de Atlanta. (AP)
El escolta JJ Redick aportó 28 puntos y el base novato australiano Ben Simmons logró un doble-doble, logros que permitieron a los Sixers de Filadelfia vencer a domicilio 121-113 a los Hawks de Atlanta y llegar a los 15 triunfos consecutivos, la mejor marca en la historia del equipo.
La victoria también dejó a los Sixers con marca de 51-30 y terceros en la Conferencia Este, puesto que podrán mantener si en el último partido de la temporada regular consiguen ganar o los Cavaliers de Cleveland (50-31) pierden el suyo.
En caso que los Cavaliers ganen y los Sixers pierdan, sería el equipo de Cleveland el que consiguiese el tercer puesto al quedar empatados ambos con 51-31, y tener ventaja en la serie entre ellos.
Simmons, que por la mañana no pudo asistir a la sesión de los tiros a canasta por sufrir un virus estomacal, al final pudo jugar y destacó con un doble-doble de 13 puntos, 10 rebotes y seis asistencias antes de dejar el campo, con siete segundos por jugarse, al quedar eliminado por seis faltas personales, incluida una técnica que le señalaron en el tercer periodo.
Pero los Sixers tuvieron toda la ayuda de los reservas, el ala-pívot turco Ersan Ilyasova que aportó 26 puntos y el escolta italiano Marco Belinelli, quien llegó a los 20 al combinarse ambos para anotar nueve triples de los 17 de 37 intentos que encestaron los Sixers.
Justo dos años después de tener la peor marca de la NBA con 10-72, los Sixers habrán surgido como el tercer mejor equipo de la Conferencia Este.
Las ocho últimas victorias las han conseguido sin su pívot titular, el camerunés Joel Embiid, que se recupera de una fractura ocular en el ojo izquierdo.
El alero Taurean Prince volvió a ser el líder del ataque de los Hawks al conseguir 27 puntos, que no impidieron otra derrota más del equipo de Atlanta, que los deja con marca de 24-58, la peor desde la temporada del 2005.