Habitación. La máquina, del tamaño de una habitación pequeña, cuenta con un sistema de 20 qubits.
En el marco del CES 2019, IBM presentó su primera computadora cuántica comercial para usarse fuera de un laboratorio, lo que representa un notable avance en el desarrollo del cómputo del futuro.
La máquina, del tamaño de una habitación pequeña, cuenta con un sistema de 20 qubits (bits cuánticos) que ofrecen un poder de cómputo tan grande que puede usarse para aplicaciones de investigación especializada y de negocios. Esta solución, conocida como "IBM Q System One", incluye todo lo que una empresa necesitaría para comenzar con sus experimentos de computación cuántica, incluida la maquinaria de enfriamiento.
"Los sistemas IBM Q están diseñados para afrontar los problemas que actualmente se consideran demasiado complejos y exponenciales para que los sistemas clásicos puedan manejarlos. Las aplicaciones futuras de la computación cuántica pueden incluir encontrar nuevas formas de modelar datos financieros y aislar factores de riesgo globales clave para hacer mejores inversiones, o encontrar la ruta óptima a través de sistemas globales para una logística ultraeficiente y optimizar las operaciones de la flota para entregas", divulgó IBM en un comunicado.
La empresa también destacó que este sistema está respaldado por tecnología de ingeniería criogénica que proporciona un ambiente cuántico frío y aislado, optimizado para la estabilidad, confiabilidad y uso comercial continuo. Asimismo, se informó que en este desarrollo se incluyen herramientas de la "computación clásica" para, por ejemplo, proporcionar acceso seguro a la nube.
Crean sensor de uñas inteligente. Esta semana también se informó que investigadores de IBM crearon un "sensor de uñas" portátil e inalámbrico que aprovecha el poder de la inteligencia artificial.
El prototipo de IBM Research, el primero de su clase, mide continuamente la forma en que la uña de una persona se dobla y se mueve en actividades diarias lo que representa un indicador asociado con la efectividad de la medicación en individuos con Parkinson, el grado de función cognitiva en los esquizofrénicos y el estado de salud cardiovascular, entre otras afecciones.
En términos generales, el desarrollo consiste en medidores conectados a la uña y una pequeña computadora que toma muestras de los valores de tensión, recopila datos del acelerómetro y se comunica con un reloj inteligente. El reloj también utiliza modelos de aprendizaje automático para evaluar, entre otras variables relevantes, la bradicinesia (lentificación de los movimientos complejos), el temblor y la discinesia (movimientos anormales), que son síntomas de la enfermedad de Parkinson.