Comparado con una manzana, que tiene unas 100 calorías, comer un aguacate al día se consideraría como comer 2 ó 3 piezas de fruta al día. (ARCHIVO)
Además de ser un clásico en la comida mexicana, el aguacate aporta varios beneficios a la salud
Originario de México y Guatemala, el aguacate (Persea americana), también conocido como palta o cura, aporta numerosos beneficios a la salud, pues está repleto de nutrientes esenciales como vitamina B, ácido fólico, potasio y grasas saludables.
El potasio ayuda a regular la presión sanguínea y protege contra infartos y enfermedades cardíacas, además de ayudar al proceso de digestión facilitando la eliminación de toxinas. Es importante para el funcionamiento mental óptimo, ya que ayuda a combatir la fatiga y la depresión.
Se ha demostrado que el consumo de aguacate disminuye los niveles de colesterol, pues son una fuente importante de ácidos grasos monoinsaturados como el ácido oleico, el cual protege contra el cáncer de mama, omega 3, que protege contra las enfermedades cardíacas y lecitina, crucial para un tejido nervioso saludable.
Si bien tiene un contenido alto de calorías (cerca de 400 por un aguacate grande), la grasa del aguacate es esencial para mantener la elasticidad de la piel. Ayuda a estimular la producción de colágeno, el cual previene las arrugas, y vitamina E, que ayuda a mantener una complexión saludable.
La combinación de las vitaminas B6, C y D, la riboflavina y el manganeso dentro del aguacate, lo vuelven el alimento ideal para mantener fuerte al sistema inmunológico. Además de ser altamente nutritivo, también ayuda a absorber los nutrientes de otros alimentos, como los carotenoides encontrados en vegetales como la zanahoria y la espinaca.
¿ENGORDA?
No es el aguacate el que engorda, sino el exceso. Y es que los estudios han demostrado que no sólo ayuda al metabolismo, sino que también echa una mano en la tarea de perder peso. Claro que, con matices.
Añadiendo la mitad de un aguacate a tu plato diario, verás mermado el deseo de picar entre horas. El aguacate tiene un efecto saciante en el organismo y reduce el deseo de asaltar la nevera durante las 3-5 horas siguientes.
Una de las claves por las que se activa el deseo y la necesidad de comer reside en los alimentos que elegimos para saciar el hambre cuando nos asalta.
Cuando sentimos que "nos baja el azúcar" y se nos dispara el hambre, la insulina se ha activado. La grasa y las proteínas no la activan, como si lo hacen algunos tipos de azúcares y los hidratos de carbono. El aguacate tiene precisamente un gran contenido de grasas monoinsaturadas o "grasas buenas", por lo que resulta ideal para calmar esa sensación.