El tiroteo de esta mañana en colegio Cervantes de Torreón, que dejó dos muertos y seis lesionados, generó psicosis entre los padres de familia, quienes se enteraron por los medios de comunicación. (ERNESTO RAMÍREZ)
El tiroteo de esta mañana en colegio Cervantes de Torreón, que dejó dos muertos y seis lesionados, generó psicosis entre los padres de familia, quienes se enteraron por los medios de comunicación.
José de la Torre, padre de familia del colegio, declaró que cuando llegó al lugar los papás estaban eufóricos mientras que los guardias de las entradas trataban de tranquilizarlos, ya que todos querían ir por sus hijos y llevárselos.
En entrevista, De la Torre señaló que su esposa fue quien le avisó que había un tiroteo en el colegio a donde asiste su hija al kínder, por lo que salió de su trabajo y se dirigió directo al lugar.
“Al llegar al lugar había mucha gente, todos corriendo y llorando, pues uno también nervioso y se me hizo larguísimo el viaje del trabajo al colegio y lo que quería era ver a mi hija”, indicó.
Contó que cuando arribó a la escuela se dio cuenta de que los niños del kínder no escucharon nada de lo sucedido, ya que las instalaciones del jardín de niños se encuentra en la calle de enfrente de la primaria y secundaria.
José comentó que los hicieron pasar rápido por lo niños e indicó que al salir trató de cubrir a su hija para que no viera lo que estaba pasando “pero obviamente levantó su carita y vio algunas cosas".
Agregó que, en la parte del kínder las maestras supieron mantener la calma y los pequeños salieron muy tranquilos, aunque al salir se dieron cuenta de que algo estaba pasando.
“Sí fue algo escalofriante porque nunca habíamos vivido esto y en Torreón nunca se había visto eso. Nunca había pasado nada parecido y se nos hizo extraño porque es uno de los mejores colegios de La Laguna y fue lo que más nos extrañó”, aseguró.
Al ser cuestionado de si seguiría llevando a su hija a ese colegio, José de la Torre dijo que sí, que la situación era muy lamentable, pero que se puede controlar la seguridad.
“Yo pienso que los padres de familia que estábamos 100 alertas ahora vamos a estar 200 por ciento, porque fue una situación que se salió de las manos, pero pienso que se puede controlar y se pude prevenir”, agregó.
Por su parte, una alumna del Colegio Cervantes relató el cómo vivió los hechos durante el tiroteo en el que perdieron la vida una maestra y un menor de 11 años.
Al ser cuestionada si sabía de algún reto viral dijo no saber o desconocer si existía.
Relató que escucharon las detonaciones a pesar de que los salones se encuentran separados, mientras que su maestro del aula les indicó que se agacharan y se pusiéramos debajo de las bancas y cerró la puerta.
Asimismo, la tía de uno de los menores lesionados, señaló, a las afueras del Sanatorio Español, que no sabe cuántos días va a permanecer su sobrino, quien recibió un impacto de bala en un pie y que le gustaría que les revisaran las mochilas a los niños constantemente.
