La nueva caravana de migrantes hondureños con destino a Estados Unidos partió en la noche de martes a miércoles y se espera que en esta misma jornada lleguen a Corinto, en la frontera con Guatemala, reportaron medios locales.
Se trata de la primera caravana que parte de Honduras este año, pero con escasas posibilidades de lograr su cometido, coincidieron funcionarios gubernamentales y defensores locales de los derechos humanos de los migrantes.
El punto de reunión y posterior partida fue la central metropolitana de autobuses de San Pedro Sula, en el noroccidente del país, mismo lugar donde se reúnen peregrinos que van a Esquipulas en el sureste de Guatemala y cercano a la frontera con Honduras.
Año con año van hasta 20 mil peregrinos de Honduras al santuario del Cristo Negro en Esquipulas, y en este los migrantes coinciden con ellos, lo que dificulta precisar su número.
La vicecanciller hondureña Nelly Jerez adelantó empero que se trata de "un número bastante reducido", que tiene derecho a salir de Honduras pero portando sus documentos.
Recordó que de acuerdo al tratado de libre comercio entre Honduras y Guatemala, los ciudadanos de un país pueden pasar de uno al otro simplemente portando su tarjeta de identidad, sin embargo si no lo llevan o tratan de salir de Guatemala pueden ser detenidos.
En 2019 hubo 109 mil 185 hondureños retornados a su país bajo la modalidad de deportación, alrededor de 64 mil desde México y más de 40 mil desde Estados Unidos, precisó en declaraciones a Radio Cadena Voces.
En el mismo año recién terminado se registraron 335 hondureños que fallecieron en la ruta entre su país y la frontera con Estados Unidos, vía que calificó de "bastante peligrosa".
Añadió que fruto de ese éxodo 27 mil hondureños se encuentran en ciudades fronterizas del norte de México en espera de que Estados Unidos resuelva sobre su solicitud de asilo.
Jerez dijo que entre esos 27 mil, de los cuales ninguno ha recibido respuesta positiva a su solicitud de asilo, figuran menores de edad algunos de los cuales viajan solos, así como familias completas.
Por familia se paga a los traficantes de personas siete mil a 10 mil dólares, pero se han detectado casos en que el pago ha llegado a los 15 mil dólares.
Recordó que si se encuentra que un solicitante de asilo ha sido detenido con anterioridad en Estados Unidos sin documentos, su solicitud automáticamente es rechazada.
En la misma Radio Cadena Voces la defensora de derechos humanos del migrante, Itsmania Platero, explicó que en Honduras es prácticamente imposible arraigarse por la gran dificultad para encontrar algún empleo, por lo que migrar a Estados Unidos se intenta aunque se haya sido regresado.
Señaló que en efecto la nueva caravana coincide con la peregrinación al santuario guatemalteco del Cristo Negro, que este año se estima formada por unas 20 mil personas, y cuyos integrantes con la simple tarjeta hondureña de identidad pueden ingresar a Guatemala.
Por su parte el medio hondureño Contracorriente aseveró que la caranava busca entrar a Guatemala no solo por Corinto, en Puerto Cortes, sino también por Agua Caliente, en el departamento de Ocotepeque.
Agregó que el primer grupo salió anoche, y otros 300 lo hicieron la mañana de este miércoles con destino a Ocotepeque, y destacó que en su mayoría se trata de mujeres.
La nueva caravana de migrantes hondureños con destino a Estados Unidos partió en la noche de martes a miércoles. (EFE)